El principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35, mantenía a mediodía la corrección emprendida en la apertura y se dejaba el 0,26 %, en línea con la apatía del resto de bolsas europeas, que mostraba así su indiferencia ante la victoria electoral de Merkel en Alemania.

A las 12:00 horas, el selectivo español perdía 24 puntos y se situaba en 9.147 unidades, mientras que el Índice General de la Bolsa de Madrid retrocedía el 0,31 %.

La semana arranca con "la digestión del magnífico resultado electoral de Merkel, que probablemente termine derivando en una gran coalición de gobierno con el SPD", indica el departamento de análisis de Bankinter, que señala que es probable que la postura alemana se vuelva menos severa, "aunque tampoco hay que esperar grandes cambios: sigue siendo altamente improbable que los eurobonos vean la luz algún día, ni ningún otro posible tipo de mutualización de la deuda".

La victoria de Merkel, puntualizan los analistas de Self Bank, no ha animado a los mercados, que continúan en líneas generales con la corrección emprendida en la apertura y en general con bastante atonía.

Ni siquiera el dato de la actividad manufacturera en China, el mejor en seis meses, conseguía animar la renta variable europea: Fráncfort y Milán perdían el 0,10 %, Londres, el 0,25 %, y sólo París lograba una insignificante subida del 0,03 %.

Dentro del IBEX destacaba el recorte del Sabadell (2,58 %), así como el repunte de Sacyr (2,14 %), el mayor del índice; en el mercado abierto media docena de inmobiliarias y constructoras experimentaban también fuertes alzas, del 42,11 % para Quabit, del 20,69 % para Montebalito, del 7,69 % para Realia, del 5,97 % para San José, y del 5,32 % para Colonial.

Entre los grandes valores del mercado, sólo Inditex se negociaba al alza y subía el 0,58 %; el resto sufría pérdidas del 0,08 % para BBVA, del 0,19 % para Iberdrola, del 0,22 % para Telefónica, y del 0,23 % para Santander.

Repsol, que prepara una emisión de bonos en euros a ocho años, se dejaba el 1,13 %.

Hasta las 12:00 horas, el parqué español había negociado 542 millones de euros, de los que 81 correspondían al Santander, y 64 a BBVA.

En el mercado de divisas, el euro retrocedía ligeramente frente a la moneda estadounidense y se cambiaba a 1,350 dólares.