El debate independentista provocó ayer la primera baja entre las filas del PSC en el Parlamento catalán con la renuncia a su acta de diputado del alcalde de Lleida, Àngel Ros, quien explicó que hoy no quiere votar contra la petición de traspaso de la competencia para convocar referendos.

En cuanto a los otros diputados "críticos" con la decisión de los socialistas catalanes de votar "no" a la petición al Congreso para que se traspase a la Generalitat la competencia para convocar referendos a través del artículo 150.2 de la Constitución mantuvieron hasta última hora de la noche de ayer la incógnita sobre su voto.

La renuncia de Àngel Ros y la reunión de los diputados críticos ha eclipsado el encuentro celebrado en Madrid entre los líderes del PSOE y del PSC, Alfredo Pérez-Rubalcaba y Pere Navarro, respectivamente, que tenía como objetivo presentar una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno a reunir de forma urgente la Comisión Bilateral Estado-Generalitat.

Ros, que dirige la corriente crítica Agrupament Socialista, confirmó ayer en una rueda de prensa el abandono de su escaño, que justificó por sus discrepancias con la actual dirección del PSC, pero también por su deseo de no romper la disciplina de voto cuando hoy sea sometida a votación la propuesta de petición de traspaso de competencias a la Generalitat.

Su rueda de prensa tuvo lugar poco después de una comida que han tenido en un restaurante barcelonés cinco diputados críticos: Joan Ignasi Elena, Rocío Martínez-Sampere, Marina Geli, Xavier Sabaté y el propio Àngel Ros, mientras que la también crítica Núria Ventura no asistió finalmente a este encuentro.

Uno de los diputados que asistió a este encuentro, Xavier Sabaté, que no está adscrito a ninguna de las corrientes críticas del PSC, anunció que acatará la disciplina de voto, aunque él personalmente es favorable a la consulta y la seguirá defendiendo.

En cuanto a los otros cuatro diputados, que sí están adscritos formalmente a los sectores críticos Avancem y Agrupament Socialista, por el momento, se mantiene la incógnita sobre el sentido de su voto

Los posicionamientos de los "críticos" del PSC coincidieron con la visita a Madrid del primer secretario del PSC, Pere Navarro, quien se reunió con el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y acto seguido fue registrada en el Congreso una proposición no de ley para instar al Gobierno a reunir de forma urgente la Comisión Bilateral Estado-Generalitat.

Según Navarro, la renuncia de Ros "es un gesto que le honra, porque pone por encima de sus intereses personales el interés colectivo del partido", y dejó claro que "va a continuar siendo alcalde por mucho tiempo", porque es un "excelente alcalde".

Sobre la posición del resto de diputados críticos del PSC, indicó que "lo que todo el mundo tiene que hacer con su voto es seguir las indicaciones que el máximo órgano del partido ha establecido democráticamente".

Navarro no quiso avanzar qué medidas tomará la dirección del PSC con los críticos si alguno finalmente rompe la disciplina de voto y recordó que él siempre ha actuado conforme al criterio de aceptar las decisiones mayoritarias, incluso cuando estaba en minoría.

Al margen de la controversia existente en el PSC, se da por seguro que hoy será aprobada en el Pleno del Parlament la propuesta de petición de traspaso de la competencia para convocar referendos.