Cristina Cifuentes (Madrid, 1 de julio 1964) visita Tenerife por primera vez -aunque ya había estado en Canarias- para dar una conferencia en el Real Casino sobre seguridad y competitividad. Con las críticas aún retumbando sobre el dispositivo de seguridad de la proclamación de Felipe VI -que prohibió la exhibición de banderas republicanas-, ratifica su defensa a favor de regular por ley las manifestaciones, las huelgas y las redes sociales convencida de que no atentaría contra los derechos ciudadanos.
¿Cómo ve el panorama político tras las elecciones europeas?
De estos comicios los partidos debemos sacar varias conclusiones, como el rechazo de un sector de la población al bipartidismo y también que hay que recuperar la confianza del electorado. Muchísimos no fueron a votar por desconfianza a los políticos.
¿Qué piensa de Podemos?
Respeto cualquier partido político que tenga el apoyo ciudadano. Nació como fruto de parte del descontento, pero no me gusta porque tiene planteamientos más propios de dictaduras latinoamericanas que de países avanzados europeos. Está claro que Podemos no quita votos al PP: el problema del PP no es con Podemos ni sus votantes. No hay que mirar para afuera, sino ver por qué nuestros propios votantes no quisieron volver a confiar en nosotros.
¿Y qué cree que le pasó al PP?
Hay que explicar las medidas que hemos tomado como Gobierno: algunas han sido muy impopulares e iban en contra de nuestro programa electoral, pero hoy la situación es diferente a la de hace dos años y medio. Tenemos que trabajar mucho y pisar mucho la calle.
¿Hay que permitir o no el referéndum del sistema de Estado?
La abdicación de Juan Carlos I abre una segunda transición y Felipe VI traerá cambios, pero la monarquía en España es parlamentaria y constitucional porque la soberanía reside en el pueblo, que votó la Constitución.
¿Qué cree que hay que regular del derecho a manifestarse?
El Gobierno no tiene intención alguna de modificar el derecho de reunión, que está protegido por la Constitución por lo que hay que protegerlo para garantizar que sea pacífico y que se respeten también los derechos de los que no se quieren manifestar. Desde que ocupo el cargo y hasta mayo, en Madrid ha habido 9.179 manifestaciones. Hay que compatibilizar los derechos de unos y otros.
¿Es también partidaria de regular el derecho de huelga?
La misma Constitución reconoce que debería haber una regulación de la huelga, es una asignatura pendiente y es importante hacerlo.
¿Hay que regular, además, las redes sociales?
Es como poner puertas al campo, pero internet permite mucha impunidad y desde su anonimato se comenten delitos. No solo injurias, amenazas o coacciones, sino también estafas, delitos informáticos y otros que afectan a menores. La ley debería ir un poquito más allá en esto.
¿Y todas esas regulaciones no restringirían los derechos civiles?
No es verdad, es solo adaptar las layes a la situación actual.
¿Qué piensa de José Manuel Soria?
Es un excelente ministro. Es una suerte para los canarios tener a un canario en el Gobierno defendiendo no solo los intereses nacionales, sino también los de las Islas.
¿Va para alcaldesa de Madrid?
¿Yo?
Sí, usted.
No.
¿Seguro?
En la vida no hay nada seguro, pero no estoy en la carrera electoral ni me gustaría.
Bárcenas y los ERE. ¿Está justificado el desapego ciudadano?
Claro que sí, lo entiendo. La corrupción es un cáncer.
¿Es compatible corrupción y democracia?
Sí, siempre y cuando se luche contra la corrupción, que no es solo política. Si los partidos no acaban con la corrupción, la corrupción acabará con la democracia.
¿La mayoría absoluta da carta blanca para hacer o deshacer al margen de lo que diga la calle?
Para nada. Hay que tratar de gobernar desde el diálogo, pero gobernar supone tomar decisiones. Creo en el consenso cuando se trata de grandes decisiones de Estado, pero no veo mal que un partido aplique su programa. Una manifestación no sustituye la voluntad manifestada en las urnas.