La Policía Nacional, con funciones exclusivas en inmigración ilegal, ha logrado la detención de dos personas de nacionalidad argelina, integrantes de una red criminal perfectamente estructurada, que se dedicaba habitualmente a la introducción de personas de forma ilícita en España.

A pesar de que la llegada a costas murcianas de pateras desde el norte de África se ha reducido en los últimos años, fruto de la implantación de distintos sistemas de detección y de las labores realizadas por las Brigadas de Extranjería y Fronteras del Cuerpo Nacional de Policía, en las últimas fechas lograron eludir este tipo de controles unas pocas embarcaciones procedentes de Argelia y, más concretamente, de la provincia de Mostaganem.

El presente año han llegado a las playas de Cartagena un total de seis pateras, con ochenta ciudadanos extranjeros, todos ellos de nacionalidad argelina, siendo cuatro menores de edad, que fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Menores e ingresados en los correspondientes Centros de Protección, según han informado fuentes policiales en un comunicado.

Iniciadas las investigaciones por la Brigada Local de Extranjería y Fronteras de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cartagena junto al Grupo III de la UCRIF de la Jefatura Superior de Policía de la Región, los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una organización criminal implantada en Argelia, que captaban a sus conciudadanos para introducirlos ilegalmente en España.

Estos inmigrantes eran escondidos varios días en distintos inmuebles de la organización donde eran aleccionados por los miembros de la organización sobre las formas de actuar en caso de ser detectados por la Policía española, además de recibir las "oportunas" amenazas tanto personales como familiares para evitar cualquier tipo de colaboración con las autoridades de nuestro país.

Finalmente, eran trasladados a la zona de Mostaganem, lugar más próximo geográficamente con España (unos 250 kilómetros, 135 millas naúticas), donde tras abonar entre 500 y 1.000 euros eran subidos en embarcaciones de recreo de pocos metros de eslora, tanto neumáticas como de fibra de vidrio, y con capacidades máximas para cuatro o cinco personas, donde llegaban a transportar hasta quince personas, para aumentar los beneficios de cada viaje para la organización.

Con toda esta información recabada por los agentes se procedió en una primera fase a la detención de dos personas integrantes de una importante red ubicada en España y Argelia.

Estos detenidos, de 37 y 33 años de edad y nacionalidad argelina, se podrían encuadrar dentro del grupo de los conocidos como ''pateristas'', con la responsabilidad en la organización de gobernar la embarcación así como la de custodiar y esconder a los inmigrantes en Argelia durante las horas y días previos a la salida.

Los detenidos, según los investigadores, son reincidentes en este tipo de viajes como prueba las veces que han sido expulsados a su país tras introducirse en pateras en España y mimetizarse con el resto de tripulantes para evitar su detención. Estos dos individuos fueron puestos a disposición del Juzgado en funciones de Guardia de Cartagena que ordenó su ingreso en prisión.

Asimismo, hay que hacer constar que el año pasado, tras culminar una investigación por parte de los agentes adscritos a la Brigada Extranjería y Fronteras de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cartagena, donde fueron detenidos dos miembros de otra organización, fueron condenados por la Sección Quinta de la Audiencia Provincial, tratándose de la primera sentencia en este sentido dictada en la Región.