El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha destacado hoy que la "vía de la reinserción" debe de ser la "clave" de la política penitenciaria con los presos de ETA, "un camino convergente al desarme total de ETA y al reconocimiento del daño causado para lograr un final ordenado de la violencia".

Urkullu ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación tras participar junto a la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejería; el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, y el alcalde de Azpeitia, Eneko Etxeberria, entre otros representantes institucionales, en la comitiva de autoridades previa a la misa celebrada en la basílica de Loiola con motivo de la festividad de San Ignacio.

Urkullu ha destacado el "gesto absolutamente ejemplar" del expreso de ETA Ibon Etxezarreta al acudir al homenaje de su víctima, el ex gobernador civil de Gipuzkoa Juan María Jauregui, por el reconocimiento del daño "injusto causado".

Ha señalado además que se están planteando las bases de un "suelo ético compartido por las formaciones políticas" que consiste en un final ordenado de la violencia etarra.

El primer paso de este proceso, ha recalcado, debe ser "el desarme total y verificable" de la banda terrorista, seguido del "reconocimiento del daño causado" tanto por parte de ETA como por la izquierda abertzale, "que ha justificado la práctica de la violencia durante años".

El lehendakari ha agregado que, junto a esto, y "en un camino convergente", debe producirse la modificación de la política penitenciaria, en la que la clave debe de estar "en la vía de la reinserción".