La hasta ahora miembro de la Ejecutiva Nacional de Vox, Cristina Seguí, ha dimitido como miembro de la dirección del partido para convertirse en militante de base tras las acusaciones de lucro irregular contra el presidente en funciones de esta formación, José Luis González.

Según anunció ayer Seguí, esta decisión guarda relación con la investigación que el propio partido -fundado por el exdirigente del PP Alejo Vidal-Quadras- iniciará el próximo 1 de septiembre para aclarar si González cometió alguna irregularidad, tal como denunció Seguí recientemente a través de los medios de comunicación.

"Más que una denuncia lo que hice fue una petición al presidente del partido para que explicara la razón por la que una empresa privada a su nombre factura al partido de 11.676 euros al mes, algo que no es apropiado para un partido que quiere ser diferente", indicó Seguí.

En consecuencia, espera que "como presidente provisional dé explicaciones, asuma responsabilidades o ambas cosas".

Según Seguí, "han pasado los días y el único movimiento es un tuit público en el que me tacha de insidiosa, yo no me reconozco en el lenguaje de este señor por lo que he decidido abandonar la ejecutiva".