El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha advertido este lunes al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que sentará un "peligroso precedente" si reforma la ley electoral para modificar la elección de alcaldes rompiendo lo que han sido "las reglas del juego" sin el consenso con el principal partido de la oposición.

En rueda de prensa al término de la primera ejecutiva socialista del nuevo ''curso político'', Sánchez ha avisado a Rajoy de que, si reforma la ley electoral sin el concurso de los socialistas para hacer que en los municipios gobierne el cabeza de la lista más votada, legitimará a futuros gobernantes para hacer lo mismo.

"El señor Rajoy no va a gobernar eternamente y si abre esa puerta también los que gobiernen en el futuro se verán legitimados para cambiar unilateralmente las reglas del juego de la ley electoral", ha avisado el máximo dirigente socialista, quien también ha recordado a Rajoy que su propuesta puede propiciar la "consolidación de grupos extremistas como Bildu".

Sánchez, que ha anunciado que el PSOE hará una convención ciudadana sobre regeneración democrática, ha recalcado además que su partido tiene una concepción de la democracia "en las antípodas" de la del PP.

Así, ha reprochado a Rajoy que nunca haya "practicado la regeneración democrática" en sus cargos. "Por sus hechos los conoceréis", ha dicho, al tiempo que le ha afeado que pretenda "imponer un cambio en la ley electoral a meses de las elecciones" y sin el apoyo del principal partido de la oposición, pero también su reforma de la Ley de Seguridad y la futura reforma de la ley del aborto, "un recorte de la democracia y de las libertades".

REUNIONES CON LOS DEMÁS PARTIDOS

Con este panorama en el PSOE no ven margen para poder llegar a acuerdos en este terreno con el PP y, según ha explicado Sánchez, lo que van a hacer es impulsar su propias propuestas de regeneración a través de iniciativas parlamentarias que después tendrán reflejo en sus programas electorales de las municipales y autonómicas y de las generales.

Sánchez, que ha avanzado su deseo de reunirse en las próximas semanas con los portavoces de los demás grupos parlamentarios para trasladarles esas propuestas, así como su proyecto de reforma constitucional, ha vuelto a desgranar gran parte de las que tiene que ver con la regeneración democrática.

Así, ha defendido la reforma de la Ley de Partidos y su fusión con la Ley de Financiación de la formaciones políticas, la obligatoriedad de que todas elijan a sus candidatos por primarias abiertas, la limitación de mandatos (tanto en los cargos de los partidos como en la Presidencia del Gobierno, en este último caso a ocho años), que se garantice la paridad a nivel partidario e institucional y que se prohíban las donaciones de empresas a formaciones políticas.

También aboga por una "revisión profunda" de la figura del indulto para prohibir que se conceda por motivos políticos y por cambiar la ley de incompatibilidades de los altos cargos para evitar más casos del fenómeno conocido como ''puerta giratoria''.

LOS CORRUPTOS, QUE "LA PAGUEN" Y DEVUELVAN EL DINERO

En este punto, Sánchez ha anticipado que una de sus propuestas tendrá como objetivo garantizar que los corruptos no sólo "paguen" por sus delitos sino que devuelvan con su patrimonio todo el dinero que hayan logrado reunir ilícitamente aprovechándose de su cargo público. "No se trata sólo de que la paguen, sino también lo paguen con su patrimonio y sus bienes", ha enfatizado.

Además de someter estos asuntos al debate parlamentario, el PSOE tiene previsto convocar en octubre una Convención Ciudadana sobre regeneración democrática, abierta a todos los ciudadanos que tengan algo que aportar y en la que también participarán expertos.

Y ese que Sánchez, ha querido subrayar que uno de sus principales compromisos es "desterrar la vieja política". Según ha explicado, comparte la "profunda decepción de los ciudadanos con la política de siempre" y por eso está decidido a finiquitarla. "He venido a cambiar la política en España, a acabar con la política de siempre, a desterrar la vieja política y a hacer una política con los ciudadanos", ha proclamado.

Así, ha llamado a todos los españoles a participar en ese "proyecto de cambio ciudadano" que quiere poner en marcha con el deseo de que "ilusione" a la sociedad y permita a su partido volver a ganar en el futuro. Sánchez ha reconocido que "esto no se hace en un mes" cuando se le ha preguntado sobre los últimos sondeos electorales en los que no se refleja el ''efecto Sánchez'' y Podemos pisa los talones a su partido.

NI CON PODEMOS, NI CON EL PP

El líder socialista ha confesado que mira todas las encuestas "con los mismos ojos" y que su objetivo es trabajar con "humildad, perseverancia y con la mayor cercanía posible" a los ciudadanos. Respecto a la formación que lidera Pablo Iglesias, Sánchez ha subrayado que el PSOE "no es amigo de extremos" y va a construir "un proyecto alternativo y autónomo de cambio ciudadano" por mucho que desde el PP se le pretenda "aliar" con Podemos y desde Podemos, con el PP.

Y es que Sánchez está convencido que la sociedad españoles tiene "sed de cambio" de "progresar y de avanzar" después de seis años de profunda crisis y de dos años y medio de gobierno ''popular''. Para ilusionar a esos españoles que quieren cambios, además de las propuestas de regeneración, el PSOE va a plantear un programa destinado a la creación de empleo y una reforma fiscal alternativa a la del Gobierno que alivie de cargas a las clases medias, haga pagar más a los que más tienen y persiga el fraude fiscal.

En un momento de su intervención, Sánchez ha acusado a Rajoy de "frivolizar" con la "desgracias" de los españoles y le recalcado que las "desgracias no son una moda, sino una realidad" porque en España hay muy poco trabajo y el que se está creando es precario. "Los números de Rajoy no son los números de los españoles", ha añadido.

En paralelo, el PSOE va a centrar sus esfuerzos en impulsar una reforma de la Constitución que permita "blindar el Estado de bienestar" y en recuperar la influencia de España a nivel internacional y, sobre todo Europeo.