El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara,anunció ayer muy emocionado, ante el Consejo Político de su organización que no se presentará como candidato a la Presidencia del Gobierno en las primarias que está previsto que se celebren el 8 de febrero del próximo año.

Ha sido la sorpresa de una reunión que llevaba en el orden del día el calendario de primarias y la presentación del informe político por parte del coordinador federal, quien no ha podido contener las lágrimas tras el largo aplauso de sus compañeros.

"He tomado esta decisión porque quiero a esta organización" y "creo en el esfuerzo y en el trabajo", ha afirmado Lara: "No creo en líderes, creo en el liderazgo colectivo", ha añadido el líder de IU, tras confesar que había tomado la decisión hace tiempo.

Lara ha asegurado que se siente representado por "la gente digna" de su organización y ha advertido de que "nadie, nadie, nadie, ningún poder financiero, ni ningún poder económico o mediático va a quebrar" a IU porque está "solidificada" por la lucha por la sociedad socialista en democracia y libertad.

El coordinador federal ha mostrado su total confianza en IU, que es la "fuerza del cambio" -ha dicho- y le toca construir alternativa.

"Somos gente sólida y estamos en las instituciones", ha afirmado.

El calendario propuesto por el coordinador de la Presidencia de IU al Consejo Político, José Luis Centella, establece que el día 13 de diciembre se aprobará el reglamento de las primarias, que serán las primeras abiertas a los simpatizantes de la formación.

Un proceso, según ha explicado Centella, que se desarrollará entre el 23 de enero y el siete de febrero.

El 8 de febrero se celebrará la votación, cuyo resultado se ratificará el día 14 de ese mes.

IU afronta así esas primarias sin Lara como candidato a la Presidencia, lo que vuelve todas las miradas al responsable de diseñar el proceso constituyente que el partido quiere poner en marcha, el diputado malagueño Alberto Garzón, quien de momento no ha desvelado sus intenciones.

El anuncio de Lara ha restado atención a otro asunto que en los últimos días ha provocado el malestar de algunos dirigentes: el caso de las tarjetas opacas, al que Cayo Lara, que seguirá siendo el coordinador federal de IU hasta 2016, también se ha referido.

Lo ha hecho para llamar a la responsabilidad y pedir que no se hiciera de los casos de corrupción que han salpicado a IU la causa de este Consejo Político.

Ha recordado que dos de los 84 titulares de las llamadas tarjetas ''black'' habían formado parte de IU, pero ya están apartados de la organización, que les ha exigido responsabilidades.

La respuesta de IU en la Comunidad de Madrid -ha destacado- es que estos días están compareciendo varios miembros de la organización ante la Comisión de Transparencia, y ha solicitado que se aplace la resolución definitiva hasta que la próxima reunión extraordinaria de la Presidencia para no entorpecer el proceso de primarias.

Cayo Lara ha apelado expresamente a distinguir entre "algún caso" concreto que pueda tener IU y las tramas de corrupción que "están agravando la crisis" y "carcomiendo los cimientos de la democracia".

"No somos todos iguales, ni actuamos de la misma manera", ha exclamado tras enumerar escándalos como la operación Púnica, la Enredadera, el caso Pujol, el de Monago o el de los ERE en Andalucía, que -a su juicio- demuestran la existencia de tramas organizadas para delinquir.

En esos casos, ha pedido que se depuren todas las responsabilidades políticas, ha exigido la dimisión del presidente extremeño y la convocatoria de elecciones anticipadas en Extremadura, y se ha mostrado partidario de que los socialistas Manuel Chaves y José Antonio Griñán dimitan de sus cargos públicos si son imputados por el Tribunal Supremo.

Además ha destacado el trabajo de IU en la lucha contra la corrupción con la presentación de multitud de iniciativas en el Parlamento, la última con 45 medidas -entre ellas acortar el periodo de prescripción de dichos delitos- a las que el PP se ha opuesto.

Por eso, el informe denuncia que el PP y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no tienen autoridad para ser abanderados de ninguna regeneración democrática, cuando la corrupción es su "seña de identidad".

El coordinador federal de IU ha comenzado su discurso con referencias a la situación en Cataluña tras la consulta del 9N, y ha apostado por el reconocimiento del derecho a decidir.

Tras criticar el enfrentamiento y la polarización entre Rajoy y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, Lara ha abogado por un proceso constituyente en el que negocie con todas las fuerzas políticas una consulta con "plenas garantías democráticas".