La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, instó ayer a la líder de los populares en Madrid, Esperanza Aguirre, a explicar por qué ha mantenido como trabajador del partido a su exgerente, que dimitió tras conocerse que había gastado 58.000 euros con una tarjeta opaca de Caja Madrid.

Cospedal reaccionó así tras la publicación de informaciones sobre la continuidad de Beltrán Gutiérrez Moliner -que hasta su dimisión dependía de la dirección nacional- en la plantilla del PP de Madrid, que la cúpula territorial confirmó y que suscitó además numerosas e importantes críticas en las filas de los miembros y grupos de la oposición.

Gutiérrez Moliner anunció el pasado 7 de octubre que dejaba el puesto de gerente del PP de Madrid, que ocupó durante 14 años, tras conocerse un informe de Bankia que revelaba que gastó 58.000 euros con una tarjeta de Caja Madrid emitida al margen de los circuitos regulares por su condición de consejero de la entidad.

El exgerente dejó el cargo después de que la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, lo hubiese destituido como asesor municipal y tras pedir su cese el día anterior la dirección nacional del Partido Popular, de la que dependía orgánicamente.

En un comunicado, el Partido Popular de Madrid ha defendido la continuidad del antiguo gerente como trabajador del partido alegando que nunca fue despedido, que trabajaba para la formación antes de ser nombrado gerente y por ello mantiene su antigüedad, por lo que María Dolores de Cospedal ha pedido explicaciones.