El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, clausuró ayer la convención del PP pidiendo a los suyos que mantengan la cabeza "bien alta" y con el orgullo de haber traído ya el cambio a España. Advirtió, además, de que no hay alternativa en los "conjuros caribeños" de Podemos ni en la "vuelta atrás" del PSOE.

Rajoy cerró el cónclave que durante tres días ha reunido a los populares en Madrid con un discurso en el que hizo gala de los resultados económicos, garantizó que no está dispuesto a permitir que la corrupción empañe toda su gestión y arremetió contra quienes ofrecen "planteamientos mesiánicos" y "doctrinarios". Un mensaje directo a Podemos del jefe del Ejecutivo, al que unió sus críticas a las del PSOE: "España no está para dar saltos en el tiempo, no podemos volver atrás", dijo.

Además, dos días después de que el expresidente José María Aznar llamase al partido a mantener sus esencias, recuperar la centralidad y ganar las elecciones por una "necesidad histórica", Rajoy abrió su intervención subrayando su orgullo por el PP. Y delante de Aznar, los barones del partido y la actual dirección subrayó que la "grandísima organización" que en su día soñó el fundador del partido, Manuel Fraga, es hoy "una gran realidad".

En todo momento, al repasar su gestión, se refirió Rajoy al "cambio que está transformando España" y al hecho de que se ha dado "la vuelta" a la situación que dejaron los socialistas y se ha salvado al país de una "catástrofe" que hace tres años "parecía inevitable". "Ése y no otro es el cambio", dijo Rajoy, quien criticó en numerosas ocasiones a los socialistas por no reconocer la mejora económica ni querer hablar de la recuperación. "No vaya a ser que los españoles recuerden quién les metió en la crisis y quiénes les estamos sacando de ella", afirmó.

También contrapuso el "cambio" que está protagonizando su gobierno con el que pretende Podemos. Así, tras señalar que los problemas no se resuelven con "conjuros caribeños" ni "planteamientos mesiánicos", señaló, en clara alusión a Pablo Iglesias, que "no es lo mismo dar doctrina en un programa de televisión que defender los intereses de España en el Consejo Europeo". "No podemos jugarnos el futuro a la ruleta rusa de la frivolidad, la incompetencia o el populismo", insistió el jefe del Ejecutivo en un discurso en el que también ha aludió al problema de la corrupción.

Tras la salida de la cárcel del extesorero del PP Luis Bárcenas, Rajoy lamentó que haya quienes entraron en política para obtener réditos personales y recordó que su partido ha intervenido "sin dudarlo" cuando ha advertido la existencia de conductas punibles.