El PSOE mantiene la unidad con el Gobierno a la hora de afrontar el desafío del terrorismo yihadista, pero ha pasado de esperar a que se pasen las elecciones del 20 de diciembre para tomar una decisión a meter prisa el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, para que no demore su oferta de ayuda a Francia.

A menos de una semana para que comience la campaña electoral, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez no ve motivos para que el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, postergue la respuesta de España, aunque esto supusiera entremezclarse con la actividad frenética de mítines y debates electorales.

Sin poner en cuestión la unidad con Rajoy, Sánchez ha matizado su postura en los últimos días y se ha instalado en la necesidad de que el Gobierno diga algo ya sobre qué ayuda prevé ofrecer a Francia, como han hecho otros socios europeos, como Reino Unido y Alemania.

Desde que tomó las riendas del PSOE, Sánchez ha mostrado una especial sintonía con el presidente francés, François Hollande, y su primer ministro, Manuel Valls, quien le telefoneó nada más ocurrir los atentados de París el pasado día 13 para mantenerle al tanto.

El pasado día 20, Sánchez era partidario de esperar a la oferta de Francia y la resolución que presentase ante la ONU, y advertía a Rajoy de que no podía adoptar ninguna medida antes de las elecciones generales.

"Este tipo de decisión no la puede tomar la Diputación Permanente, sino las nuevas Cortes Generales y el nuevo Gobierno, que estará más legitimado", lo justificaba entonces.

Una semana después, Sánchez cree que si Francia reclama ya colaboración, no se puede perder tiempo en la respuesta, ni condicionarla al 20D.

"Podemos, perfectamente, responder a través de la Diputación Permanente y de un gran acuerdo de las fuerzas políticas. Lo deseable sería una vez constituidas las nuevas Cortes con un nuevo Gobierno, pero si Francia nos pide ese socorro antes, tendremos que activar los mecanismos que la Constitución y el Parlamento tienen planteados", sostuvo el jueves en Telecinco.

Sánchez cree que Rajoy tiene que "mojarse", en vez de "esconderse", y demostrar que hay que ser solidario con Francia "sin ningún tipo de condición", ya que no hay que tener dudas en la lucha contra la amenaza del autoproclamado Estado Islámico (EI).

Con la delicadeza que exige un asunto como éste en puertas de las elecciones, el PSOE ha dejado claro que no comparte la postura de Podemos y de sus alcaldes afines de rememorar el "no a la guerra" con una concentración hoy en Madrid.

Ferraz no respalda esta protesta porque cree que no es comparable esta situación a la que se vivió en 2003 con la guerra de Irak.

No obstante, el PSOE no ha dado pistas de qué tipo de operación militar apoyaría o de en qué región se podría ayudar a Francia, más allá de dejar claro que rechaza el envío de tropas a Siria porque sería un "error".

La tesis que ha mantenido Sánchez hasta ahora es que la lucha contra el EI "no es una guerra, sino un combate integral contra el terrorismo" que requiere una estrategia común de la UE, dentro de la cual, cada estado miembro tiene que determinar las capacidades militares que podría ofrecer.

Parar los pies al EI también pasa, según el PSOE, por cortar sus vías de suministro de armas y de financiación y por que los socios comunitarios permitan que sus servicios de inteligencia colaboren más estrechamente, creando incluso un FBI europeo.