El PSOE ha anunciado hoy que no emprenderá negociaciones con otros partidos "para intentar fraguar una alternativa de Gobierno estable y, mucho menos, cuando se plantean desde el chantaje", después de que ayer el líder de Podemos, Pablo Iglesias, le propusiera un Gobierno de las dos fuerzas junto a IU.

Los socialistas han hecho público un comunicado en el que insisten en que no iniciarán negociaciones con otras formaciones políticas y menos cuando se "anteponen los intereses de partido a los intereses de los ciudadanos".

"El PSOE sí mantiene y mantendrá contactos y diálogo con todas las fuerzas políticas, y lo va a seguir haciendo, con el fin de evaluar la situación y acercar posiciones en torno a cómo afrontamos los graves desafíos que España tiene, y a los problemas que acucian a muchos ciudadanos", añade el comunicado.

Las prioridades para construir un nuevo proyecto de país en el que se comprometa una mayoría deben girar, a juicio del PSOE, en torno a "políticas e ideas concretas, nunca en torno a tácticas, intereses partidarios o imposiciones unilaterales". "Es un momento para el diálogo, la negociación y el acuerdo en interés de España y de los españoles. Esta ha sido siempre nuestra guía de conducta, y la vamos a seguir manteniendo", concretan.

Para el partido que lidera Pedro Sánchez, la decisión del presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, de declinar el encargo del Rey para presentar su candidatura a la investidura y a la vez no renunciar es "inaceptable" y "sólo comprensible desde la complicada situación judicial que afronta su partido, imputado estos días por corrupción".

"Lo que ha hecho el señor Rajoy sitúa a España ante una nueva utilización partidista de las instituciones y de las reglas democráticas como nunca se había conocido en nuestra historia en democracia", añaden los socialistas.

El PSOE, continúa el texto, defiende el cumplimento escrupuloso de los procedimientos democráticos y por tanto cree que Rajoy tiene la "obligación constitucional" de aceptar el encargo y presentar su candidatura a la investidura o renunciar definitivamente a ella.

"Mantenerse a la espera, por razones de supervivencia política y personal, amparándose en la existencia de hipotéticas mayorías alternativas, es una irresponsabilidad poco acorde con los intereses de los ciudadanos y con los retos que tiene planteados nuestro país", considera el partido.

Se refiere además a la nueva ronda de consultas que ha convocado el Rey la próxima semana y opina que de ella debería salir, de nuevo, "el encargo de formar Gobierno a una persona propuesta por el primer partido en la cámara".

"Por ello, y mientras tanto, el PSOE no va a emprender negociaciones con otras fuerzas políticas para intentar fraguar una alternativa de Gobierno estable y, mucho menos, cuando se plantean desde el chantaje y anteponiendo los intereses de partido a los intereses de los ciudadanos", insisten los socialistas.

Mariano Rajoy declinó ayer el ofrecimiento del Rey de someterse a la investidura para ganar tiempo y buscar apoyos que le permitan seguir gobernando después del órdago que Pablo Iglesias lanzó a Pedro Sánchez.

Horas después de que Iglesias ofreciese a los socialistas pactar la formación de un Gobierno, con Sánchez como presidente y él como vicepresidente, Rajoy optó por no ser "de momento" candidato a la investidura ante la certeza de que no tiene apoyos suficientes.