El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha defendido este martes el modo en el que ideó y anunció su decisión de consultar a las bases sobre un hipotético acuerdo de gobierno, un movimiento que no había adelantado a sus presidentes autonómicos. "Yo no oculto nada, soy secretario general del PSOE y ejerzo mi responsabilidad", ha dicho.

Así ha respondido Sánchez en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, después de reunirse con Felipe VI en la segunda ronda de consultas para la formación de gobierno, cuando, por tercera vez, se le ha preguntado por qué no informó a sus ''barones'' de estos planes en las conversaciones privadas que mantuvieron la semana pasada.

En estos encuentros en Ferraz, Sánchez no avisó de su intención de someter cualquier pacto de gobierno a los militantes a los presidentes autonómicos, tal y como ellos mismos reconocieron después de escuchar su anuncio ante el Comité Federal del partido el pasado sábado. Algunos dirigentes más afines sí aseguraron conocer estos planes.

Al margen de esto, Sánchez no ha querido hablar de la situación interna de su partido, de la que tampoco ha aclarado si ha hablado con el Rey, ya que ha advertido de que no daría ninguna información sobre la conversación que han tenido en Zarzuela.

Previamente, se le ha preguntado por las palabras del presidente de Asturias, Javier Lambán, diciendo que hay un "empeño generalizado de desacreditar a los secretarios regionales del PSOE y de enfrentarlos a los militantes de sus respectivas regiones". "En absoluto", ha dicho Sánchez.

"SIEMPRE" ABOGÓ POR ABRIR EL PARTIDO A LAS BASES

Al margen de esto, ha defendido su decisión de acudir a la militancia y la ha desvinculado de las diferencias que surgieron entre la dirección y algunos territorios sobre la fecha del congreso. "En absoluto", ha respondido, cuando se le ha planteado si tuvo que ver con ese conflicto.

Según ha dicho, en su candidatura a las primarias para la Secretaría General y en su discurso de investidura cuando fue elegido hace más de 18 meses "siempre" defendió que "el PSOE tendría que abrir desde la dirección consultas a la militancia". De hecho, ha subrayado que la elección del líder del partido por primarias ya fue "un paso decisivo" en este sentido.

Y ahora, ha explicado, tiene "esa legitimidad" y cree que es el momento de "abrir mecanismos de consulta a la militancia". "No se me ocurre mejor momento y mejor asunto que poder debatir y también decidir conjuntamente con el Comité Federal y con la militancia un eventual acuerdo de gobierno con distintas formaciones políticas", ha dicho.

Además, y pese a las discrepancias sobre las posibilidades de llegar a acuerdos y con quién que se hicieron patentes en el pasado Comité Federal, Sánchez ha asegurado que se siente "fuerte" para afrontar este proceso. Si no fuera así, ha dicho, no habría dado "el paso" de mostrarle al Rey su predisposición para intentar formar gobierno.

El secretario general ha lanzado otro mensaje en clave interna a cuenta del apoyo de los independentistas, que ha vuelto a decir que no va a buscar. Sánchez ha querido hacer una "puntualización" cuando se ha mencionado que el Comité Federal no le permite negociar con los independentistas: "A mí el Comité Federal no me impide, me impiden mis convicciones, siempre he dicho que no voy a ser presidente a cualquier precio", ha dicho.