El expresidente de Caja Madrid (ahora Bankia) Miguel Blesa relatará hoy al juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz en qué consistieron las presiones que sufrieron tanto él como la entidad bancaria por parte del presidente de Ausbanc, Luis Pineda, en prisión desde el 18 de abril.

Blesa, que será juzgado a partir de septiembre por el caso de las tarjetas "black" y que también está imputado por los sobresueldos a miembros del Consejo de Administración de Caja Madrid, acude este jueves de nuevo a la Audiencia Nacional para prestar declaración, aunque esta vez lo hará como testigo.

Según los informes policiales que obran en la causa en la que se investigan las presuntas extorsiones de Ausbanc y Manos Limpias, Caja Madrid fue objeto del "acoso" que Pineda ejercía a entidades bancarias o financieras que rechazaban publicitarse en los medios de Ausbanc como fue también el caso del BBVA, Novagalicia o Crédit Services.

De Caja Madrid, ayer testificó su exdirector de Comunicación Juan Manuel Astorqui, quien afirmó que "en el ambiente" se percibían las presiones de Pineda ante su alardeo de contactos en el PP de la Comunidad de Madrid.

Presiones que, dijo, se veían reforzadas por el puesto que ostentaba su mujer en la administración regional como directora general de Consumo.

Las presiones, según Astorqui, se tradujeron concretamente en publicidad negativa de la entidad y en campañas de desprestigio contra él y contra Blesa.

Además de Blesa, hoy comparecen otros dos testigos en esta causa: el directivo de Catalunya Banc Joan Rafols y Ramón Luis García Torre (vinculado a la misma entidad).

El viernes cerrarán la ronda de testificales el expresidente de NovaGalicia José María Castellano Ríos y la exabogada de Manos Limpias Montserrat Suárez.