Un grupo de arqueólogos que está excavando las trincheras de la Guerra Civil en la Ciudad Universitaria sitúa la batalla de Madrid, el 19 noviembre de 1936, a más de un kilómetro de la zona donde se creía que el gobierno de la República había parado a los nacionales, "un hallazgo verdaderamente importante".

El investigador Alfredo González Ruibal, del Instituto de Ciencias del Patrimonio del CSIC, propone "musealizar" las trincheras ubicadas en terrenos de la Complutense, donde se han hallado "trazas de combate a corta distancia, granadas, proyectiles de mortero y balas de pistolas".

Para González Ruibal, "esto cambia un poco la historia, porque se pensaba que donde se había parado el ataque sublevado era en el río Manzanares, en la zona del puente San Fernando, al sur de Puerta de Hierro".

Hasta ahora, la atención se había puesto "en las facultades, la de Medicina y el Hospital Clínico, lugares icónicos de la guerra", pero las excavaciones han revelado que en otro margen del campus "también se estaba dirimiendo el futuro de la guerra y de la ciudad".

Estas excavaciones, financiadas "en un 80 % con dinero de EEUU e Inglaterra" a lo largo de este mes, suponen "un hallazgo verdaderamente importante e indican que la arqueología puede ayudar a rescatar la historia militar y política".

El objetivo de la investigación es "entender la guerra en Madrid, no solo en la Ciudad Universitaria"- cuyas trincheras defendían brigadistas internacionales, sobre todo polacos-, "sino en toda la región y la historia global", ha dicho el responsable del primer año del proyecto, que espera extenderlo a cinco años y cubrir de 1936 a finales de los cuarenta.

"Madrid era la primera capital del mundo que se enfrentaba a una guerra moderna", como ocurrió con Sarajevo y ahora con Alepo, ha explicado en una trinchera republicana de segunda línea, detrás de la Facultad de Psicología de la UNED.

En la Casa de Campo, hay una trinchera de "gran interés histórico, probablemente la única que se conserva de la batalla de Madrid", defendida por brigadistas alemanes durante dos semanas y que "no fue reutilizada" como otras. También se excavan las fortificaciones franquistas alrededor de la universidad y emplazamientos de cañones donde se hallaron restos de la artillería disparada sobre Madrid.

Estas zonas se "podrían musealizar por su valor didáctico para entender la guerra" y, para ello, se hará "un informe científico" que se entregará a las autoridades.

El proyecto tiene "una parte de arqueología y otra de historia pública, que busca que la gente cuente la historia a través de testimonios", que se cuelgan en el blog http://guerraenlauniversidad.blogspot.com.es/.

Se trata de usar la "posmemoria, porque la gente que lo cuenta ya no es de primera mano, sino los hijos, que son los legatarios de este testimonio", según el equipo con el que colaboran la Universidad del País Vasco, la Complutense de Madrid y la de Nottingham, en Reino Unido.