La cúpula del Partido Popular ha decidido por el momento guardar silencio y no hacer valoraciones sobre la grave crisis que vive el PSOE.

"No nos toca", han admitido fuentes de la dirección del partido, que han explicado que han acordado no hacer comentarios sobre la situación que viven los socialistas tras la dimisión ayer de todos los miembros de la Ejecutiva críticos con Pedro Sánchez.

Otras fuentes de la dirección señalan también que es "de sentido común" que el PP no se dedique estos días a valorar lo que hace el PSOE, y no es necesaria una consigna para hacerlo.

Sólo un miembro del comité de dirección, Pablo Casado, ha hablado hoy de este asunto, aunque se ha limitado a hacer el mismo comentario que ayer, al desear "lo mejor" al PSOE y subrayar que es "imprescindible" tener un Partido Socialista que suponga una alternativa de "izquierda moderada".

Casado ha señalado también que espera que la situación se aclare cuanto antes.

En este sentido, fuentes populares admiten que interesa que la crisis interna tenga algún tipo de desenlace pronto para saber si va a ser posible un nuevo intento de investidura por parte de Mariano Rajoy o, por el contrario, se celebran nuevas elecciones.