El expresidente socialista de Castilla-La Macha José María Barreda considera que en este momento coincide el interés general, el del sistema, el de no ir a unas terceras elecciones, con el interés partidista", porque a los socialistas les iría mal.

En una entrevista en ''Los Desayunos de TVE'', recogida por Europa Press, el ex dirigente socialista ha defendido que si hubiese elecciones es probable que la brecha que existe entre el PP y los socialistas, "se agrandase más".

Aún así, Barreda ha compartido la opinión del presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, cuando decía este domingo que de las dos opciones que tiene el PSOE --ir a unas terceras elecciones o abstenerse para facilitar un gobierno de Mariano Rajoy--, ambas "son malas". "Pero no queda más remedio que jerarquizar los rechazos", ha añadido.

Preguntado sobre si las bases del PSOE también comparten esta decisión, el expresidente castellanomanchego ha declarado que éstas "están divididas, como el conjunto del partido". Con todo, cree que los socialistas deben afrontar la responsabilidad y "tomar decisiones".

En ese contexto, ha opinado que la decisión de abstenerse "es una cuestión táctica, no ideológica" y tomarla no significa "un compromiso de larga duración" con el PP. "Hay que superar el instinto primario de negar el pan y la sal al adversario, la democracia implica pactar pero eso no significa que tú pierdas tu identidad", ha manifestado.

Aunque al PSOE le queda poco tiempo para debatir su posición --si el 31 de octubre no hay presidente se disuelven las Cortes-- cree que el que hay "se puede aprovechar". "El calendario es el que es, ojalá que lo hubiéramos hecho antes", ha lamentado.

De hecho, cree que parte del problema interno de su partido, que en estos momentos está dirigido por una gestora, ha sido la incomunicación entre compañeros y "no plantear las cosas con nobleza". Es más, Barreda ha planteado que lo que debería haber hecho el PSOE después del 26J es pensar "en las posibilidades reales" que tenía y no "intentar cosas que llevaban a callejones sin salida".