La Guardia Civil detuvo en la madrugada de ayer en Calahorra (La Rioja) a un presunto yihadista por actividades relacionadas con la organización terrorista Daesh, según informaron fuentes del Ministerio del Interior.

El arrestado es A.B., de nacionalidad marroquí, que fue acusado de varios delitos de terrorismo.

Las investigaciones que el pasado 1 de diciembre condujeron a la detención de Salim Aghmir, indica el Ministerio, "situaron en el punto de mira de los agentes al ahora detenido, que era asiduo del local de hostelería que el primero regentaba en Pamplona", y que, indica, "participaba directamente en actividades relacionadas con el enaltecimiento y la difusión de propaganda de la organización terrorista Daesh".

Tras constatar su participación directa en las actividades citadas, los investigadores observaron que A.B. aumentaba de forma evidente las medidas de seguridad adoptadas, tanto en sus desplazamientos por la ciudad como en sus actividades en la red, "en un intento de que pasasen inadvertidas y, sin duda, ante su sospecha de estar siendo objeto de algún tipo de vigilancia policial", afirma Interior.

Estos hechos llevaron al investigado a trasladar "de modo repentino y sorpresivo" su residencia a la localidad riojana de Calahorra. Los responsables de la investigación constataron que, tras la detención de Salim Aghmir, "el investigado continuó de forma autónoma con su proceso de radicalización, adoctrinamiento y autoadoctrinamiento terrorista", dice Interior, "realizando actividades en apoyo de los postulados de distintos grupos terroristas que operan en las zonas de conflicto de Siria e Irak, principalmente Daesh". Los investigadores destacan "su apoyo explícito a las recientes acciones terroristas reivindicadas por Daesh en París, así como a los musulmanes que viajan a Siria e Irak para combatir en las filas de la organización terrorista". Interior destaca que se ha podido evidenciar en las últimas actuaciones de terroristas yihadistas en suelo europeo que "el perfil del detenido es coincidente con la mayoría de ellos, tratándose de personas aparentemente integradas en la comunidad de residencia y que, tras un proceso de radicalización, pasan a abrazar los postulados de Daesh, convirtiéndose en individuos potencialmente peligrosos para la seguridad nacional".

las claves

El apresado ayer llegó a frecuentar el local de hostelería que regentaba otro detenido por el mismo motivo el pasado 1 de diciembre, según informó ayer el Gobierno.

El individuo trató de pasar desapercibido, tanto en sus desplazamientos por la ciudad como en su actividad en internet. Y cambió su domicilio.