El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha llamado este jueves a identificar y trabajar para evitar las causas que llevaron al Holocausto judío perpetrado por los nazis: "Hay gestos que lo presagian y otros que lo desactivan", ha sostenido, y ha instado a trabajar en estos últimos.

Lo ha dicho en el acto del Día Internacional de la Conmemoración de las Víctimas del Holocausto en el Parlament, al que han asistido la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, miembros del Govern, diputados y representantes y asociaciones de víctimas del Holocausto.

"Participo en este acto de recuerdo conmovido y emocionado pero agradecido de que se haga", ha explicado, y ha insistido en la necesidad de reparar el daño de las víctimas y de sus familiares.

El presidente ha mostrado su rechazo a la ideología nazi que creció a mediados del siglo XX en una Europa "rota por dentro", y ha recordado el papel que tuvo el nazismo en la muerte del expresidente de la Generalitat Lluís Companys.

Puigdemont ha advertido de que el Holocausto es una amenaza futura: "No comienza cuando se persigue o se quema a la primera víctima", sino que las causas son anteriores, ha dicho en un acto en el que se han encendido seis velas en recuerdo de colectivos de víctimas y en el que han intervenido estudiantes que han participado en un proyecto educativo sobre el Holocausto.

La alcaldesa ha explicado que el Holocausto enseña hasta dónde puede llegar una sociedad en nombre de la pureza racial, y ha llamado a "no bajar la guardia ante todas las formas de racismo emergentes en Europa y en el mundo".

Ha pedido no olvidar lo sucedido y, tras los parlamentos de los jóvenes que han presentado sus trabajos, les ha dicho que su generación son "el puente que conecta entre el pasado y el futuro" para que puedan dar testimonio y no se repita.

"El negacionismo, el antisemitismo y las ideologías que promulgan el odio no tienen que tener cabida en nuestras ciudades y países", ha sentenciado la primera edil de la capital catalana.

La presidenta del Parlament ha cerrado el acto, tachando el nazismo de "expresión máxima del horror humano", y ha recordado que nació en una Alemania en crisis que convirtió la rabia de una parte de la sociedad en odio hacia los judíos sin motivo, y a la otra parte la hizo mirar hacia otro lado.

"Un pueblo culto del centro de Europa pasó a considera a otro inferior y lo masacró", ha lamentado Forcadell que ha recordado que ese odio se extendió a otros colectivos entre los que ha destacado a los republicanos que huyeron del franquismo.