La periodista y presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), Victoria Prego, ha señalado que la imputación del director de La Razón, Francisco Marhuenda, por presuntas coacciones a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, "no tiene ningún recorrido".

Así, ha señalado que la imputación tanto de Marhuenda como del presidente de ''La Razón'', Mauricio Casals, que han declarado ante el juez Velasco como investigados por presuntas coacciones a la presidenta madrileña para evitar que denunciara las irregularidades en el Canal de Isabel II, "no tiene ningún recorrido, porque se trata de una conversación (con Edmundo Rodríguez Sobrino) que el juez ha querido investigar, algo que está muy bien".

Asimismo, ha asegurado que "no ha habido ninguna amenaza" sobre la presidenta de la comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, de quien a dicho además que ha sido ella misma la que ha señalado que "no se ha sentido ni amenazada ni chantajeada".

"Eso es un episodio que no tiene ningún recorrido", ha reiterado Prego, en respuesta a los periodistas sobre el asunto momentos antes de iniciarse en Mérida el acto inaugural de la LXXVI Asamblea General de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE), como representante de la agrupación más numerosa, la madrileña.

En su opinión, ha dicho a los periodistas que lo "saludable" es que la relación entre los políticos y la prensa sea "pésima", que es lo "habitual". "Lo bueno es que nos llevamos tan bien como mal, y eso es lo saludable y lo normal", ha remarcado.

Sobre los contenidos de la Asamblea, Victoria Prego ha señalado que los problemas que afectan al colectivo son "infinitos", porque los periodistas están en estos momentos "acosados por mil amenazas diferentes".

"La crisis del negocio, la crisis del periodismo, el acoso de las redes sociales que pretenden sustituir el periodismo responsable por la difusión de cualquier cosa, sea falsa o sea cierta", así como la crisis del propio código deontológico de la profesión. "El periodismo está en un momento crítico", ha subrayado.

Asimismo, ha reconocido que el problema de "credibilidad" que afecta a los periodistas es "en parte" culpa de los propios profesionales y no solo de las empresas para las que trabajan, porque "se ha utilizado el periodismo sin cumplir el código deontológico de la profesión" y porque "hay mucha gente fuera muy interesada en desacreditar a la prensa", por lo que se trata de un problema tanto interno como externo.

Ante todo ello, lo que tienen que hacer los periodistas es "informar, como siempre, respetando los códigos, informar objetivamente y honestamente". "La respuesta es resistir y actuar".

Sobre la propuesta de que los alumnos de Educación Secundaria estudien los medios de comunicación, uno de los asuntos a debate en el cónclave, ha señalado que "conviene explicar" a los jóvenes españoles que "aunque reciben mucha más información, están mucho peor informados que sus padres".

Esto es porque "reciben un volquete de información en la que hay basura, oro, arena... de todo". "De eso tienen que ser conscientes, porque si no perderán su condición de ciudadanos y se convertirán en objetos manipulables", ha sentenciado.