El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha lamentado que las siete enmiendas a la totalidad que empiezan a debatirse hoy en el Congreso estén más relacionadas con cuestiones políticas que con temas económicos.

Durante la primera jornada del debate de las siete enmiendas a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado de 2017 en el pleno del Congreso, Montoro ha criticado que una parte del rechazo a los Presupuestos Generales del Estado de 2017 responda a motivos partidarios, y ha afirmado que el Gobierno no trae unas cuentas por "empeño arbitrario ni deseo personal".

El ministro ha señalado que el Gobierno también es consciente de que "no se la juega con la presentación de estos presupuestos", que -en su opinión- servirán para que esta legislatura pueda sacudirse cualquier sospecha de incertidumbre y ha asegurado que estos presupuestos no deben servir para confrontaciones "maniqueas".

"Ni séptimo cielo ni siete plagas", ha dicho Montoro, tras pedir que el debate no se produzca con el fin de vencer y que "más allá de criterios ideológicos España avance en su prosperidad".

Montoro ha indicado que estas cuentas pretenden tener una vida útil de seis meses, pero que son importantes porque permitirán sacar a España del procedimiento excesivo de déficit y promover el empleo.

"Debemos calificarlos de transición, ya que enlazan con los Presupuestos Generales de 2018", ha aseverado.