Los dos abogados, un hombre y una mujer, acusados de grabar a escondidas la declaración de la infanta Cristina como imputada en el caso Nóos el 8 de febrero de 2014 ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, han negado hoy en el juicio los hechos que se les atribuyen.

"Yo no he grabado nada, ni me dedico a eso", ha asegurado el primero de los acusados que ha declarado al inicio del juicio que celebra hoy ante el juzgado de lo Penal 6 de Palma contra él y una compañera a quienes se acusa de sendos delitos de desobediencia grave por los que la Fiscalía les reclama penas de un año de prisión.

"Es el mayor ataque a mi dignidad que he sufrido como persona", ha declarado en el juicio, que se celebra en la misma sala en que se produjeron los hechos objeto de la vista, una habitación de la segunda planta de los juzgados de Palma a la que el día en que declaró la infanta se accedía tras pasar estrictos filtros de seguridad porque el juez Castro había prohibido entrar con aparatos de grabación.

"No grabé nada, de ninguna manera, ni portaba nada, ni se me hubiera ocurrido, ni accedí con nada", ha incidido el acusado, que se ha desligado absolutamente de la difusión de una grabación de vídeo a través de una plataforma de internet y que difundió también el diario "El Mundo" al día siguiente de la declaración de la infanta.

Por su parte, la otra acusada ha negado que fuera ella quien registró el vídeo y ha señalado que sospecha que lo pudieron hacer funcionarios de los juzgados de instrucción. "Mi carrera profesional y personal yo no me la juego por nada", ha subrayado.

Ha apuntado que le extrañó el comportamiento de los funcionarios del juzgado que asistieron a la declaración, quienes según el otro encausado no pasaron los estrictos controles de seguridad a los que sí fueron sometidos el resto de los que entraron en la sala para seguir el interrogatorio.