El jefe de la investigación policial del ''caso Guateque'', José Luis Cebrero, se ha mostrado "sorprendido" este martes ante la sentencia del tribunal de la Audiencia de Madrid que absuelve a todos los acusados por anular toda la prueba practicada durante la instrucción, y ha defendido el trabajo de la Guardia Civil.

Así lo ha indicado este martes Cebrero en una entrevista en la radio municipal M-21 recogida por Europa Press, donde también ha apuntado que "le ha extrañado muchísimo todos esos que hablan de la grabación", refiriéndose a algunos titulares de los diarios españoles que hablan de la "mala fe" de la Guardia Civil.

"Efectivamente hay una intervención de un señor que estaba harto de sacar dinero para obtener licencias y grabó a uno de los que le estaba proponiendo el dinero que tenía que dar a determinados funcionarios para obtener la licencia", ha explicado el agente, al tiempo que ha aclarado que "una vez que consigue la grabación, el señor la entrega en la Guardia Civil y concretamente se la pasan a él", quién rápidamente "se la entregó al juez".

En este punto, Cebrero ha matizado que "el juez después de ver las pruebas que le presentan considera que hay un delito y que están extorsionando al señor por lo que le da la categoría de testigo protegido". "Fue entonces cuando nosotros tiramos para adelante", ha apostillado.

"A partir de ese momento se hicieron intervenciones telefónicas todas con mandamiento judicial", ha dicho el jefe de la investigación, que ha reiterado que "cuando el testigo va a la Guardia Civil ya va con su grabación y la realiza por sus propios medios".

De igual modo, Cebrero ha puntualizado que detrás de la investigación hubo un gran trabajo de la Guardia Civil. "Se registraron bastantes juntas de distrito para buscar pruebas con los funcionarios que presumiblemente estaban imputados", ha explicado.

Por último, Cebrero ha insistido en que "la grabación no parte de la Guardia Civil". "No ha sido que la Guardia Civil ha metido la pata o teníamos interés por algo sino que a nosotros nos entró ese asunto como entran 20.000 cosas diarias, y actuamos con la intervención del juez desde el primer momento", ha zanjado Cebrero.

La sentencia de la Audiencia carga contra la Guardia Civil por quedar demostrado que, en contra de la versión sostenida en el atestado de la Guardia Civil, fueron miembros de la Unidad Orgánica de la Comandancia del Cuerpo de Madrid (Tres Cantos) quienes entregaron al denunciante una grabadora de pequeñas dimensiones y una cinta magnetofónica.

Esta grabación de un empresario que estuvo en la causa como testigo protegido dio origen al procedimiento. La nulidad de esta prueba da lugar a que se aplique la denominada teoría de ''los frutos del árbol envenenado'' es una doctrina que hace referencia a las pruebas de un delito obtenidas de manera ilícita que contaminan el resto.