El Gobierno de Canarias pedió ayer la renovación y adaptación de la Constitución para resolver los problemas del modelo territorial con "sosiego, diálogo y consenso".

El Ejecutivo canario, en un comunicado remitido en la tarde de ayer, se mostró partidario del diálogo y del debate sobre la identidad plural y colectiva frente a "a la confrontación y el inmovilismo" para alcanzar una solución política y pacífica en Cataluña.

Según el Gobierno autónomo, es necesaria la renovación del pacto constitucional para adaptar la Constitución a una realidad "muy diferente" a la del año 1978.

"El Gobierno de Canarias apuesta por debatir sobre la identidad plural y colectiva que queremos construir entre todos para evitar que, en un futuro, se reabran nuevas heridas territoriales", señala el Ejecutivo que lidera Fernando Clavijo Batlle.

Defiende la democracia y la libertad para superar "la peor crisis institucional" a la que España se ha enfrentado y lamentó que "en esta batalla política todos hemos perdido", destacó.

"Democracia para velar por el cumplimiento de la Constitución y libertad para que exista un diálogo entre sus diferentes regiones y nacionalidades", agregó el Gobierno canario en la mencionada nota.

Asimismo, abogó por comenzar una nueva etapa para definir el país y garantizar la convivencia de todos los pueblos que integran el Estado, pues si se sigue renunciando "a un debate inaplazable", "nos estaríamos condenando a que se repita la misma historia".

Desde Canarias, continúa, "seguimos sintiendo con la misma fuerza que Cataluña forma parte del mismo espacio que compartimos muchos pueblos con realidades sociales, geográficas e históricas diferentes".

Por ello, reclamó ley y diálogo para cicatrizar las heridas "a raíz de un proceso amargo en el que hemos fracasado todos".