El vicepresidente primero del Senado, Pedro Sanz, ha insistido en que la Cámara Alta no tiene ninguna información del Gobierno sobre si va a poner en marcha los mecanismos para aplicar el artículo 155 de la Constitución en Cataluña, que implica la participación del Senado, y ha aclarado que la Cámara no tiene preparada "ninguna previsión" al respecto.

En rueda de prensa tras la reunión de hoy de la Mesa, Sanz ha reiterado lo que viene explicando desde hace semanas a raíz de la situación en Cataluña y de la insistencia de Ciudadanos y de otros sectores políticos para que se aplique ese precepto constitucional. De momento, ha vuelto a decir hoy, la Cámara no tiene ninguna indicación del Gobierno, que se el que tiene que tomar la iniciativa.

Ha recordado que el primer paso tendría que darlo el Ejecutivo requiriendo al presidente catalán, Carles Puigdemont, la vuelta a la legalidad. Sólo si no hubiera respuesta o fuera negativa, el Gobierno tendría que enviar al Senado una propuesta con las medidas que le permitieran obligar a la Generalitat a cumplir sus funciones constitucionales, que es lo que dice ese artículo 155 sin ofrecer más precisiones. Para poder ejecutar esas medidas es para lo que está prevista la participación del Senado, que las debe aprobar por mayoría absoluta del Pleno del Senado.

En ese trámite en la Cámara Alta intervendría la Comisión General de Comunidades Autónomas, que sería la encargada de debatir la propuesta del Gobierno y de requerir a la comunidad autónoma afectada los informes que considerase oportuno para defender a su vez su postura.

Ante esa comisión y además de los grupos parlamentarios podría intervenir el presidente Puigdemont, pero también el Gobierno de Mariano Rajoy y todos los gobiernos autonómicos que quisieran dejar clara su posición en un debate tan importante. La propuesta que saliese de aquí es la que se votaría en el Pleno. El PP cuenta con mayoría absoluta en el Senado.

SIN PLAZOS PREVISTOS

Sanz ha recordado que ni la Constitución ni el Reglamento del Senado señalan ningún plazo para ninguno de estos trámites y que tampoco la Cámara ha hecho ninguna estimación. Llegado el caso, si el Gobierno realmente pusiera en marcha el 155, se decidirían los tiempos sobre la marcha, como ocurre en otros casos.

"Podría ser con mayor o menor velocidad", ha admitido el vicepresidente, que ha reiterado que nada se ha previsto mientras no llegue la iniciativa a la Mesa. "Sólo podemos especular", ha zanjado.