El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que en Cataluña se ha llegado "a una situación límite" que obliga al Ejecutivo a actuar, y ha confesado que tiene la sensación de que "es lo que se pretendía por parte de algunos".

En rueda de prensa en el marco del Consejo Europeo en Bruselas, Rajoy no ha desvelado hoy ninguna medida de las que aprobará mañana el Ejecutivo ante la situación en Cataluña en aplicación del artículo 155 de la Constitución, como podría ser convocar elecciones, pero ha defendido tener que recurrir al mismo ante una "situación límite".

Rajoy ha justificado la aplicación de ese artículo del texto constitucional - que permite al Gobierno central asumir competencias de las Comunidades Autónomas que no cumplan la ley - y se ha mostrado convencido de que los dirigentes independentistas son los que han querido llegar a una situación en la que no hay más remedio que recurrir al 155.

El jefe del Ejecutivo no ha confirmado que haya acordado con el PSOE (izquierda, principal partido de la oposición), una aplicación del artículo 155 de la Constitución con el objetivo de convocar elecciones en Cataluña, tal y como ha apuntado hoy en Madrid la secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Calvo.

"Todas las medidas que adoptemos las anunciaremos mañana", ha remarcado Rajoy un día antes de la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros para activar la aplicación del artículo 155 en Cataluña.

Ante la posición socialista de que desea una aplicación limitada del mismo, ha explicado que él presentará mañana unas medidas acordadas con el PSOE y con Ciudadanos (liberales), "y luego cada uno -ha precisado- las califica como estime oportuno".

Lo que ha subrayado es que el objetivo fundamental de esas medidas, con un límite temporal que ha dicho que no está determinado, es volver al cumplimiento de la ley y a la normalidad institucional tras haber llegado a una "situación límite".

Rajoy ha dejado claro su rechazo a la actuación de la Generalitat. "No defiendo las posiciones del Gobierno catalán, pero creo que las han defendido francamente mal. No se pueden dar más facilidades de las que se les han dado", ha dicho tras reiterar que simplemente se exigió a la Generalitat que dijera que no había declarado la independencia.

Pero, además de eso, ha continuado el presidente, la Generalitat ha adoptado un "sinfín" de decisiones contra el Estatuto y la Constitución española y se ha situado fuera de la ley.

"Eso, lógicamente nos obliga a actuar", ha enfatizado el jefe del Ejecutivo, quien ha asegurado que el Gobierno ha sido "enormemente prudente, ha pensado mucho las cosas y ha advertido y avisado" de las consecuencias que todo ello podría tener.

Ha garantizado que la utilización del 155 es una medida que el Ejecutivo toma "en ultima instancia" ante una situación en la que se "golpea la ley" y se "liquida el Estado de Derecho".

Y ha recalcado: "Hemos llegado a esta situación porque han querido que llegáramos a esta situación".

No obstante, ha asegurado que el 155 "no presupone usar la fuerza", sino que es un instrumento acorde con la Constitución y similar a otros que contemplan muchas constituciones europeas.

Al plantearle si teme que pueda haber actitudes violentas en las calles en Cataluña tras aplicar el 155, ha confiado en que "las autoridades (catalanas) se comporten de una forma más responsable que en ocasiones precedentes".

Ha ratificado asimismo su apoyo y el de todo el Gobierno a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado porque ha dicho que han cumplido en todo momento con su obligación.

Tras recordar que hace sólo tres días el Tribunal Constitucional volvió a declarar la ley del referéndum contraria a la Constitución, ha lamentado que "algunos" se sitúen ahora en la "equidistancia".

Rajoy, quien ha puesto en valor el apoyo que ha recibido en Bruselas de los principales dirigentes europeos, ha avisado también de que la actual situación de inestabilidad en Cataluña puede afectar gravemente al crecimiento económico y a la creación de empleo por culpa de las "decisiones irresponsables" de políticos "que han sido incapaces de estar a la altura de la circunstancias".

"Cuando uno se entrega a los extremistas y a los radicales y les obligan a cambiar a su candidato, pasa lo que pasa", ha denunciado.

Respecto a la posibilidad de que el Gobierno pueda intervenir medios de comunicación públicos catalanes, se ha preguntado "¿quién ha dicho eso?" y ha reiterado que las medidas concretas en aplicación del 155 se conocerán mañana.

El presidente del Gobierno ha reivindicado su disposición al diálogo en toda su vida política, pero ha lamentado que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, sólo le haya planteado la exigencia de convocar un referéndum ilegal y no haya querido participar en ninguno de los foros que se le han ofrecido.