La juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela considera que el expresidente de catalán Carles Puigdemont debe responder ante la justicia por alentar un movimiento de insurrección activa entre la población y promovió actos, manifestaciones y proclamas abonando en la sociedad la idea de la existencia de un derecho de autodeterminación para Cataluña.

De esta manera, expone Lamela en el auto de detención y de ingreso en prisión la conducta sediciosa que ha tenido Puigdemont a lo largo de estos últimos meses y que le ha llevado a estar investigado por rebelión, sedición, malversación, prevaricación y desobediencia.

Hizo "nacer en la sociedad la creencia de la legitimidad de las actuaciones en contra del poder constituido para defender ese inexistente e inconstitucional derecho de autodeterminación", relata la juez al explicar su "frontal" desobediencia a las resoluciones judiciales suspendiendo las leyes de desconexión encaminadas a la independencia, que finalmente se declaró en el Parlament.