El pleno del Senado ha dado hoy la aprobación definitiva de la reforma de la ley del concierto económico vasco y del nuevo cupo para el quinquenio 2017-2021, de 1.300 millones de euros, en medio de las críticas de la mayor parte de los grupos políticos a la "opacidad" en su negociación.

Al igual que se hizo en el Congreso el pasado 23 de noviembre, las revisiones de la ley del concierto y de la de señalamiento del cupo se han tramitado en el Senado por procedimiento directo y de lectura única, lo que no ha gustado ni a Ciudadanos ni a Compromís -ambos en el grupo mixto-, que han presentado sendos vetos, rechazados por la mayoría de la Cámara.

Ciudadanos precisamente ha sido foco de las quejas del resto de partidos, que le acusan de oportunismo y populismo y de estar usando el cupo pensando en obtener rédito electoral en los comicios catalanes del próximo día 21, sin tener en cuenta las consecuencias sobre el deterioro de la convivencia que ello puede causar.

Durante el pleno, el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha subrayado que el concierto y el cupo vasco son "el reconocimiento de las singularidades de España" y no un motivo de agravio ni de privilegio.