En el Pacífico hay una serie de atolones que fueron olvidados en el tratado de 1899 en el que España vendía a Alemania sus últimas posesiones en las entonces llamadas Indias Orientales, lo que dejó un vacío legal en cuanto a su soberanía.

En una tesis publicada en 1950, Emilio Pastor, científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), defendió que algunos territorios situados actualmente en los Estados Federados de Micronesia, Islas Marshall e Indonesia son españoles.

Según Pastor, cuando España cedió en 1899 las islas Carolinas, Palaos y Marianas en la región de Micronesia a Alemania a cambio de 25 millones de pesetas no delimitó con precisión las posesiones que otorgaba, dejando fuera del acuerdo ciertos territorios.

Titulada "Territorios de soberanía española en Oceanía", la tesis del español menciona atolones como Mapia (llamado antiguamente Guedes) en el norte de la Papúa indonesia, y Rongerik, antes llamado Coroa y situado en las Islas Marshall.

También se incluyen Pescadores y Ocea, dos grupos de islas más meridionales en el estado micronesio de Pohnpei.

El experto indonesio en disputas territoriales marítimas de la universidad Gadjah Mada, I Made Andi Arsana, indica que en el caso de existir documentos oficiales que establezcan que España era dueña de esos territorios, "en términos legales" seguirían bajo soberanía española, si no hay tratados posteriores que lo refuten.

Andi Arsana añade en conversación telefónica que el primer principio que rige en las disputas, antes de otros como la habitabilidad o el uso del territorio, es el establecido en los documentos oficiales.

En noviembre de 2013, el diputado de Amaiur Jon lñarritu García, expuso esta teoría legal y preguntó la posición del Gobierno de España en consulta parlamentaria.

Iñarritu citó entonces la postura en 1949 del dictador Francisco Franco respecto a la idea de Pastor.

"Procede esperar antes de efectuar gestión alguna con Estados Unidos o con las potencias amigas que forman parte de la ONU, ya que España no tiene contactos con la ONU y sería esta la que habría de resolver sobre la suerte definitiva de esas islas", indicó Franco, según el texto de la consulta.

La respuesta del Gobierno, firmada en enero de 2014 por el entonces secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, descartaba cualquier posibilidad de reclamación soberanista debido a la intención de España de deshacerse de todas sus posesiones.

"La actitud española entre 1899 y 1948 en el que algunos medios de comunicación esgrimieron la cuestión muestra que la intención de España al firmar el tratado con Alemania era traspasar todas sus posesiones en el Pacífico", precisó el exsecretario de Estado.

En su opinión, "resultaría poco coherente que España hubiera querido ceder las Carolinas, las Palaos y las Marianas, pero se hubiera reservado la soberanía sobre unos cuantos islotes de escaso valor económico sobre los cuales nunca había ejercido su soberanía".

Además, Ayllón menciona un dictamen del 4 de enero de 1949 de la Asesoría Jurídica del Ministerio de Asuntos Exteriores español que estimó que "cualquier hipotético derecho de España sobre dichas islas habría quedado destruido por los regímenes de fideicomiso posteriores".

La respuesta del político del Partido Popular se refiere a los fideicomisos tras "la Primera Guerra Mundial con el traspaso de dichos territorios a Japón y tras la Segunda Guerra Mundial con su atribución a Estados Unidos".

En 1986, Estados Unidos puso fin a su soberanía por fideicomiso de las antiguas posesiones españolas en el Pacífico con la mediación de las Naciones Unidas, de las que España ya formaba parte.