El Gobierno desvincula el próximo traslado a Cataluña de los presos del ''procés'' de la reunión entre el presidente Pedro Sánchez y el president catalán, Quim Torra, programada el 9 de julio en el Palacio de la Moncloa.

Fuentes del Ejecutivo de Pedro Sánchez desconocen si el acercamiento tendrá lugar antes o después de esa cita e inciden en subrayar que un hecho no está relacionado con el otro porque siguen cauces distintos.

Una vez que el juez instructor de la causa, Pablo Llarena, ha informado de que no contempla nuevas diligencias que obliguen a mantener a los investigados cerca del magistrado y que haya dejado en manos de Instituciones Penitenciarias la decisión sobre su traslado, el Ministerio del Interior prepara los trámites para acercarlos a Cataluña.

Tras la providencia emitida por Llarena señalando que "no existe razón procesal" para que estén en una prisión u otra, Moncloa se ve con luz verde para que Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, proceda a acercar a los presos del ''procés'' a Cataluña, única Comunidad Autónoma que tiene transferida la competencia sobre las prisiones.

Sánchez considera "razonable" este acercamiento, una vez sustanciada la fase de instrucción, para que los presos estén más cerca de sus familias y de sus abogados, tal y como reconoció en la entrevista que concedió a TVE el 18 de junio pasado.

Una vez que los presos del ''procés'' estén en Cataluña, será competencia de la administración catalana decidir en qué centro ingresa cada uno. A partir de ese momento, la vida en prisión de los líderes del ''procés'' dejará de estar supervisada por la Administración central a través de Instituciones Penitenciarias (Ministerio del Interior), tomando el testigo el Servicio Penitenciario dependiente de la Consejería de Justicia catalana.