El presidente del PP, Pablo Casado, ha apelado a recuperar la competencia estatal sobre las prisiones catalanas y las ha definido como "cárceles a la carta", propias de "las dictaduras y los narcoestados".

Así lo ha defendido en una entrevista de Es Radio, recogida por Europa Press, tras ser preguntado por los presuntos tratos de favor que están recibiendo los soberanistas presos en la cárcel barcelonesa de Lledoners.

El líder del PP ha advertido además de que en el caso de que alcanzase la Presidencia del Gobierno, recuperaría la aplicación del artículo 155 de la Constitución en esta comunidad "muy rápido". Eso sí, "aprendiendo de los errores" que, según él, se cometieron en su anterior empleo.

De esta manera, ha lamentado que el Gobierno de Mariano Rajoy se valiese únicamente del 155 para convocar elecciones "por exigencia de Ciudadanos (Cs)" y que durante su vigencia, "por exigencia del PSOE", este precepto constitucional no afectase a los Mossos d''Esquadra ni a TV3.

SE PREVINO EL PLAN IBARRETXE

Ha tildado de "emergencia nacional" la situación que se vive en Cataluña, y ha defendido también la reincorporación al código penal de la tipificación de la convocatoria ilegal de un referéndum. En este sentido, ha señalado que la existencia de este tipo penal "previno" al ''exlehendakari'' Juan José Ibarretxe "para no acabar como el ''procés''".

Además, ha reiterado la apuesta de los ''populares'' por cambiar la ley de indultos e incluir la exclusión de los delitos de sedición y rebelión, y ha afirmado que la crisis territorial de Cataluña cada vez se asemeja más a la vivida con la ''kale borroka'' en el País Vasco. "Cómo puede permitirse que unos niñatos vayan con pancartas de Visca Terra Lliure", se ha preguntado, y ha apostado por ilegalizar los partidos "que calientan la violencia".

Casado ha reconocido que quizá se explicó mal en la cuestión de los lazos amarillos y ha matizado que no criticó al presidente de Cs, Albert Rivera, ni a la líder de la oposición en Cataluña, Inés Arrimadas, por retirarlos. Según ha explicado, le parece bien esta posición, pero es algo que debería quedar en manos de las instituciones sin "instigar a la sociedad catalana" a hacerlo, porque se puede dar "una situación de confrontación que llegue a las manos".

CONCURRENCIA EN SOLITARIO EN BARCELONA

Por último, se ha referido a las elecciones municipales que tendrán lugar en Cataluña --y en el resto del país-- en mayo de 2019, y ha asegurado que el PP tiene "un espacio" para presentarse por su cuenta.

Por ello, ha justificado que el PP no se una a la lista del candidato a la Alcaldía de Barcelona Manuel Valls porque no les ha pedido integrarse en ella y, además, "ha dicho que es socialista y de izquierdas".