Los Verdes de Icod de los Vinos han encendido la mecha de la polémica sobre el inminente derribo del teatro cine Fajardo, mientras el grupo de gobierno de Diego Afonso (CC) subraya que la decisión de demoler este inmueble "no es un capricho, sino una recomendación de los técnicos debido a que su estructura está en un estado ruinoso y podría derrumbarse". Aunque se trata de casos diferentes, la desaparición de este antiguo cine de pueblo trae a la memoria la polémica que se vivió en La Orotava en 2003 y años posteriores con la demolición del Teatro Atlante. Antes de que concluya este mandato se aclarará si la desaparición del cine Fajardo produce o no contestación social en la Ciudad del Drago.

El alcalde nacionalista considera que este caso "no es comparable al del Atlante, puesto que el cine Fajardo carece de valor histórico y arquitectónico. Su valor es sólo emotivo para algunas generaciones de icodenses". Afonso afirma que este inmueble, "de poco más de medio siglo de existencia", carece de protección de ningún tipo y que "su arquitectura es mediocre".

El mandatario icodense remarca que la rehabilitación de este cine es "inviable", a pesar de que su recuperación "fue la intención inicial del ayuntamiento y el Cabildo de Tenerife".

"Tuvimos que descartar su recuperación porque la estructura está dañada por la humedad y amenaza ruina. Existe riesgo de derrumbe y en esto los informes son claros y contundentes", destaca Afonso.

El Ayuntamiento de Icod y el Cabildo han iniciado ya el proceso de adjudicación de la demolición del antiguo cine, "presupuestada en 150.000 euros". El objetivo del gobierno es construir en este solar un centro de artes escénicas de cinco plantas, dotado con auditorio y salas de ensayo. Otra diferencia con el Atlante, que era privado y se demolió para edificar unas viviendas que aún no existen.

De momento, no hay financiación para este centro de artes escénicas valorado en unos cinco millones de euros. CC pretende ejecutarlo en el próximo mandato.

Los Verdes de Icod no comparten la versión del gobierno, al que acusan de mentir sobre el estado del cine. Su portavoz, Jonás Pérez, no entiende "cómo este gobierno presume de fomentar la participación ciudadana cuando tiene más que decidido demoler el actual cine teatro, sin escuchar las opiniones que abogan por la reforma de su cubierta e instalaciones".

LV consideran que con alrededor de un millón de euros se podría rehabilitar este recinto y acusan a CC-PP de "dejar morir el cine Fajardo para especular con la ejecución de un nuevo inmueble".

CC-PP, por su parte, piden "sentido común" e insisten en la existencia de "contundentes informes técnicos que aconsejan su derribo".