El Ayuntamiento de San Juan de la Rambla retirará ocho marquesinas de paradas de guaguas "por las que se pagaron 43.000 euros hace solo un año y medio", según denunció ayer la alcaldesa, Fidela Velázquez (PSC). La mandataria criticó al grupo de gobierno anterior (AIS-CC) por "tirar el dinero en unas estructuras endebles y cutres que tampoco cumplen las dimensiones reglamentarias".

La alcaldesa socialista informó ayer de que operarios del ayuntamiento asegurarán las estructuras dañadas y sustituirán los bancos deteriorados "para que las marquesinas aguanten en estos meses más fríos y lluviosos". A la vez, la oficina técnica redacta un proyecto para sustituir las marquesinas por otras "con un diseño más atractivo, protecciones laterales y una altura que impida que la guagua choque contra la cubierta, como ya ha sucedido en algún caso".

Velázquez, acompañada por el edil de Policía, Tomás Mesa (PP), ofreció ayer una rueda de prensa junto a una de las marquesinas precintadas por agentes municipales. A su juicio, "es lamentable que después de gastarse 43.000 euros en poner estas ocho marquesinas hace solo un año y medio, en la actualidad nos encontremos con bancos a punto de romperse, cubiertas sueltas y estructuras dañadas".

Mesa detalló que la Policía Local ha emitido un informe donde se aconseja la sustitución de estas marquesinas "inadecuadas". También expresó su preocupación porque "los usuarios de las guaguas podrían sufrir algún percance si se rompe algún banco o se cae alguna cubierta". Para evitarlo, el consistorio ejecuta ya labores urgentes de mantenimiento.

Velázquez y Mesa mostraron su extrañeza por "la baja calidad de unas marquesinas que costaron más de 5.000 euros cada una".

El portavoz de AIS-CC y exedil de Urbanismo, Marco Antonio Abreu, respondió ayer que "las marquesinas no costaron tan caras, sino aproximadamente la mitad de lo que dicen", y retó al grupo de gobierno a que "saque las facturas y demuestre cuánto costaron". Para Abreu, "el cálculo de PSC y PP no se ajusta a la verdad y es simplemente una patraña más".

Respecto al deterioro de las marquesinas, Abreu lo achaca al vandalismo y los accidentes. "Esas estructuras se hicieron con informes técnicos y aquí hemos sufrido algún temporal fuerte y las marquesinas resistieron perfectamente bien. Otra cosa es que una guagua haya chocado contra alguna o que algunos vándalos hayan estropeado asientos", subrayó.