Los inversores alemanes interesados en construir un aeródromo en la Isla Baja siguen adelante con su iniciativa y ya han elegido la posible ubicación del pequeño aeroclub: una parcela baldía en el municipio de Buenavista del Norte, junto al campo de golf y la playa de Las Arenas, donde el Plan General de Ordenación (PGO) permite una instalación de este tipo.

El alcalde de Buenavista, Antonio González Fortes (Sí Se Puede), insiste en que este proyecto no le parece "acorde con el modelo turístico que se quiere desarrollar en la Isla Baja", pero reconoce que la parcela elegida es "una zona urbanizable para uso lúdico y deportivo, por lo que sí podría construirse allí".

"Se trata de una bolsa de suelo enorme, en la trasera de la playa de Las Arenas y anexa al campo de golf", detalló Fortes.

El mandatario recalcó que el proyecto del aeródromo está en una fase "muy embrionaria" y que de momento no existe un documento técnico detallado. "De lo poco que sabemos es que la pista de aterrizaje no sería muy grande y que no estaría asfaltada, pero aún quedan muchísimas dudas por resolver", apuntó.

El posible aeródromo de Buenavista se encuentra en la actualidad pendiente de informes del área de Planificación del Cabildo de Tenerife, según confirmó ayer a EL DÍA el presidente del Consorcio de la Isla Baja, Lorenzo Dorta.

El Consorcio Isla Baja, formado por el Cabildo de Tenerife y los cuatro ayuntamientos de la comarca, dio a principios de abril el visto bueno inicial a esta iniciativa privada para construir un aeroclub dotado con una pequeña pista de aterrizaje para avionetas o ultraligeros.

Desde aquel primer anuncio, Fortes mostró su escepticismo sobre la idoneidad de la iniciativa: "La primera impresión que tengo es que no casa mucho con el modelo turístico proyectado por el Cabildo insular para esta parte de la Isla".

El Cabildo y los ayuntamientos de Buenavista, Los Silos, El Tanque y Garachico condicionaron su respaldo a la aportación de "un estudio estructurado con todos los datos del proyecto por parte de la empresa inversora", aunque recalcaban que "ya existían informes urbanísticos municipales e insulares que no impedían su construcción".

El Consorcio de la Isla Baja no ha querido dar datos sobre los inversores alemanes interesados en ejecutar este proyecto, pero sí han señalado que se trata de un aeroclub de Alemania que cuenta con "más de 6.000 asociados".