El alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez (PP), ofreció ayer una rueda de prensa urgente en la que denunció la falta de mantenimiento y control de la vegetación en el entorno del tendido eléctrico de alta tensión de la Ladera de Tigaiga, en cuyas cercanías se produjo el martes un incendio que afectó a una hectárea de pinos insignes y castañeros. El mandatario popular anunció que su ayuntamiento llegará "hasta el final" en la investigación de las causas de este fuego y lamentó las "desafortunadas" declaraciones del consejero insular de Seguridad, José Antonio Valbuena (PSC), quien ayer aseguró en la Ser que el suceso "no fue para tanto".

Domínguez instó a Valbuena a que "explique a los vecinos de Los Realejos que el incendio que los mantuvo en vilo entre el martes y el miércoles no fue para tanto. Y que se lo diga también a los vecinos que tuvimos que desalojar y a todos los que se pasaron la noche sin dormir por la cercanía del fuego".

"Este ayuntamiento quiere llegar hasta el final y aclarar qué sucedió para que ese incendio se produjera. Y si hay responsables, queremos saber quiénes son y pedirles que asuman las consecuencias de sus actos", advirtió.

Domínguez también negó que, como aseguró Valbuena, se hubiera producido "ningún trato de favor de la Subdelegación del Gobierno de España hacia Los Realejos, ya que lo único que se produjo fue una llamada de este alcalde para tratar de localizar a algún responsable de Red Eléctrica de España".

Además, el alcalde lamentó que "a algunos les moleste que salga en los medios de comunicación para explicar a mis vecinos qué es lo que pasa en cada momento".

"Después de las declaraciones de Valbuena, estoy sumamente preocupado porque parece que alguien quiere quitar importancia al suceso -apuntó Domínguez-. Además, me pregunto ¿por qué se ha puesto a la defensiva si nadie ha atacado al Cabildo de Tenerife en este asunto? Eso da razones para pensar".

El mandatario realejero negó que el pino esté en suelo urbano y afirmó que se ubica "en un paraje protegido". También recalcó que "protegido o no, yo lo hubiese cortado. De hecho dimos esa orden a los bomberos voluntarios, que no pudieron actuar porque no se cortó el fluido eléctrico y su vida corría peligro". Además, insistió en que "advertimos a todo el mundo del alto riesgo que existía desde varias horas antes de que se produjera el incendio".

Domínguez recordó que existe una ley que obliga al adecuado mantenimiento de las zonas forestales por las que discurren tendidos eléctricos, y que en el caso de la zona donde se produjo el fuego "no hace falta ser un técnico para darse cuenta de que aquello no está limpio y de que allí la ley no se cumple. El pino que se quemó estaba en contacto con los cables de alta tensión".

Además de la falta de mantenimiento, Domínguez recuerda que se dio el aviso de la existencia de fuego alrededor de las 14:00 horas del martes y el incendio se propagó alrededor de las 20:00 horas.

"Yo me he cortado los dedos y no he señalado absolutamente a nadie. Serán otros los que determinen quién es el responsable de lo ocurrido", apuntó Domínguez. Para aclarar el origen del fuego, la Policía Nacional y la Consejería regional de Industria ya han abierto dos investigaciones.

A su juicio, "a Valbuena se le ha calentado la boca", y añadió que "alguien hoy se ha columpiado y, como ha ofendido a los realejeros, también me ha ofendido personalmente a mí".

El director de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento realejero, José Marrón, también participó en la rueda de prensa, acompañado por representantes de la Policía Local y los Bomberos Voluntarios. Marrón aseguró que los bomberos del municipio trataron de apagar el fuego inicial "poniendo en riesgo sus vidas" y no abandonaron en lugar "a pesar de que la situación fue tremendamente peligrosa".