El Ayuntamiento de Los Realejos anunció ayer que tendrá que ejecutar una nueva obra de emergencia para estabilizar el talud de la playa de El Socorro, en la parte final de la vía, donde se ubican el viradero y unas 40 plazas de aparcamiento. El alcalde, Manuel Domínguez (PP), visitó ayer la zona, junto a técnicos municipales de Urbanismo, con el fin de evaluar la repercusión de los movimientos de materiales que se han producido este fin de semana y que causan "un proceso de vaciado del firme de la vía superior".

Domínguez anunció que "se va a tener que decretar una obra de emergencia para actuar cuanto antes, aunque estos trabajos no requerirán el cierre de la playa ni de la vía de acceso". De momento solo se ha clausurado la parte final de la carretera.

El mandatario realejero recalcó que "hay que garantizar el uso de la playa con todas las medidas de seguridad posibles y durante el período estival, que es cuando se produce la mayor afluencia de usuarios". Añade Domínguez que "la emergencia indica la prioridad que este gobierno le ha dado en cuanto se han conocido los efectos de la erosión. La Gerencia de Urbanismo trabaja intensamente en la redacción del proyecto, cuya ejecución será inminente".

La actuación prevista incluirá la mejora de la red de contención ya colocada, con posible sustitución de algunos tramos, así como nuevos tensores, "tras los trabajos previos de limpieza de las piedras con mayor riesgo de caída".

"Esperamos que en unas dos semanas los trabajos puedan completarse y resuelvan esta situación de emergencia, con la menor afección posible a los usuarios de la playa. Además, trabajaremos en una segunda fase, siempre que contemos con los permisos de administraciones superiores, para después de verano iniciar una actuación de contención de más envergadura", indicó.