La Unión de Profesionales de la Comunicación de Canarias (UPCC) ha denunciado como "inaceptables" las limitaciones impuestas al ejercicio de su trabajo por parte de los agentes de la Guardia Civil que desalojaron a un matrimonio de su vivienda de Tacoronte por mandamiento judicial.

El dispositivo de seguridad impidió el viernes que muchos redactores, cámaras y fotógrafos pudieran acercarse a la vivienda hasta dos horas después de que la policía hubiera derribado la puerta y desalojado a sus ocupantes, señala el sindicato de periodistas en un comunicado.

Agentes de la Guardia Civil acordonaron ambos lados de la calle e impidieron a los periodistas obtener imágenes del desalojo.

"Es una falta de respeto al libre ejercicio del periodismo que ante la queja de los compañeros a los agentes de la Guardia Civil desplazados al lugar, se les remitiera a la Subdelegación de Gobierno para que esta, a su vez, los volviera a remitir a la Guardia Civil, exculpándose de su obligación de permitir el trabajo de los periodistas".

Las únicas imágenes que se pudieron obtener del derribo de la puerta de entrada a la vivienda y del posterior desalojo fueron tomadas por los periodistas que pasaron la noche en la casa para eludir el dispositivo policial, que se instaló sobre las 5 de la mañana, de acuerdo con UPCC.

El sindicato de periodistas rechaza que bajo la excusa de la seguridad se restrinja el derecho que tiene la ciudadanía a la información.