El alcalde de Tacoronte, Álvaro Dávila (CC), dio cuenta el lunes al Pleno del medio centenar de reparos de Intervención levantados durante 2014 y aportó un informe en el que destaca que "los reparos detectados en ejercicio de la labor interventora no han sido objeto de discrepancia, su levantamiento ha estado motivado en todos los casos por razones de interés general y de adecuado funcionamiento de los servicios que se prestan a los ciudadanos". Dávila recalca que siempre se han levantado "por los órganos competentes en cada caso".

También detalla que "los levantados en relación con consumo eléctrico, telefonía y ludoteca deben considerarse de tracto sucesivo, cuya actualización se ha estado tramitando en el último año y que no se han podido sacar antes a concurso por el colapso del departamento de contratación, motivado principalmente por el hecho de encontrarnos al comienzo del mandato con la práctica totalidad de los contratos caducados y sin comenzar trámite alguno. A lo largo del presente mandato se ha ido regularizando la situación sacando a concurso uno tras otro los contratos caducados. Ahora tramitamos los últimos casos".

"Algunos reparos de la Intervención aluden al resultado desierto de concursos. En este caso tampoco hay discrepancia, no obstante, no resultaría responsable dejar sin servicios básicos a los edificios municipales", señaló.

Sobre los reparos realizados a algunas ayudas de emergencia social, recordó que son "para personas en situación de gran precariedad, que en todos los casos incluyen informes de trabajadores sociales".

Además, existen otros reparos "en un pequeño grupo de expedientes en los que se ha producido un gasto que supera el importe establecido para un contrato menor con una misma empresa".

A finales de noviembre de 2014, el alcalde anunció en rueda de prensa que está imputado por "levantar los 194 reparos que en 2012 hizo el interventor que ocupaba el cargo entonces".

Dávila dijo entonces que la mayoría de los reparos los tuvo que levantar porque cuando llegó al ayuntamiento en junio de 2011 la técnico municipal de contratación le informó de que "había 27 contratos que estaban caducados desde hacia años o a punto de caducarse. Por eso el interventor reparaba cada pago que se hacía por esos contratos".

"Tenía dos opciones, dejar de pagar y dejar al municipio a oscuras, al ayuntamiento sin telefonía móvil, secar los jardines o a los mayores sin ayuda a domicilio, o levantar los reparos. Los levanté y en estos años hemos ido regularizando los contratos", señaló.