La playa de La Arena, en Tacoronte, se cerró el 29 de enero de 2014 tras la caída de una roca de diez toneladas de peso, que llegó prácticamente a la mitad de la arena. Un desprendimiento inusual que podría haber causado una tragedia de producirse en otras fechas, y que obligó a los técnicos a reconsiderar la resistencia de todo el sistema de protección. El próximo viernes día 27 a las 17:00 horas, 14 meses después de aquel desprendimiento, la playa de Tacoronte volverá a abrirse con su ladera protegida por un complejo y costoso entramado de mallas y barreras dinámicas que pretenden cerrar el camino a cualquier roca que se desprenda.

La intención inicial del gobierno en minoría de Tacoronte (CC) fue adjudicar la obra por la vía de emergencia, pero las discrepancias con la mayoritaria oposición bloquearon este trámite en junio de 2014. La adjudicación se produjo noviembre del 2014 por un importe de 432.000 euros, financiado íntegramente por el consistorio.

La ejecución de los trabajos se ha retrasado un mes, debido, según el alcalde, Álvaro Dávila (CC), "a las lluvias, el robo de material y la rotura de maquinaria". Para colocar los 450 metros lineales de barreras dinámicas el personal ha tenido que trabajar en una ladera muy abrupta, donde ha sido necesaria la intervención de grandes grúas y un helicóptero.

Dávila destaca que los técnicos le han asegurado que con esta actuación la playa de La Arena se convierte en "una de las más seguras de Canarias". Se ha duplicado la resistencia de la barrera que protege el paseo y se han instalado tres niveles de protección para tratar de evitar que alguna piedra llegue a la zona transitada.

Durante el cierre de la playa, hace unos meses, una piedra de 200 kilos de peso cayó sobre el techo del baño público, "lo atravesó como si fuera de mantequilla y trituró la taza del váter", asegura Dávila, quien añade que cuando vio los efectos causados por esa roca se alegró de "no haber cedido a las presiones de los vecinos que me pedían que abriera la playa sin terminar las obras". Ese desprendimiento obligó a reforzar la estructura del techo de los baños y a instalar una nueva barrera.

La playa de La Arena ya estuvo cerrada por desprendimientos durante cinco meses, entre septiembre de 2011 y febrero de 2012, y ahora suma otros 14 meses de cierre para mejorar la seguridad. La principal playa de Tacoronte ha pasado 19 meses cerrada en este mandato. Un cierre por motivos de seguridad que ha afectado a la escasa actividad económica de Mesa del Mar.

El presidente de la Asociación de Vecinos El Enredadero, Martín Ferrera, aseguraba el pasado noviembre que el cierre había hundido al barrio porque "la playa es la vida de Mesa del Mar". Hace unos días, mientras se ultimaban los trabajos de limpieza y acondicionamiento de la playa, Ferrera celebraba la próxima apertura: "Ya se está corriendo la voz de que se vuelve a abrir la playa y mucha gente ha bajado a limpiar sus apartamentos".

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