La Asociación de Vecinos La Baranda (El Sauzal) "no está dispuesta a más derramas, no vamos a pagar ni un duro más" para corregir las múltiples deficiencias que padece esta urbanización desde el año 2006. El presidente, Gerardo de la Rosa, manifiesta la disposición de los afectados a "apoyar cualquier iniciativa que conlleve solucionar nuestro abandono".

En 2006, La Baranda suscribió un convenio por el que la promotora debía asfaltar un tramo de la calle principal, los vecinos abonarían 200 euros por ello y el ayuntamiento se comprometía a la recepción y prestación de los servicios básicos, explica.

"Nueve años después, La Baranda sigue siendo tierra de nadie porque la promotora está en liquidación (no existe) y, si tomamos en cuenta las advertencias de la oposición en el momento de la toma de posesión del actual alcalde, no caminamos a ningún lado sin infringir supuestamente alguna norma", apunta el presidente del colectivo.

La asociación considera que ese convenio "sigue vigente", pero denuncia falta de interés y de aplicación del mismo, señalando a la administración como responsable de no haber hecho el seguimiento en la realización de su contenido.

Para De la Rosa, el ayuntamiento "asumió el coste al no denunciar el incumplimiento vecinal" por parte de quienes no abonaron los 200 euros, por lo que "debe proceder a establecer una contribución especial en un nuevo anexo aplicable a los que, de forma insolidaria, entendieron que no debían pagar cantidad alguna".

Estando "dispuestos a apoyar cualquier iniciativa que conlleve la solución a nuestro abandono", reprochan que "aquí no se da aquello de que tanto pago tanto obtengo". Piden al gobierno municipal que implique a la oposición en la resolución de este conflicto y muestran cansancio porque "nos dan la razón, pero no la solución". Hasta el Cabildo "deja sin reparar bien la calle de entrada a la urbanización por una obra que dota a sus instalaciones de servicios telefónicos".