El Ayuntamiento de Los Realejos, la Universidad Europea de Canarias (UEC) y la Demarcación de Tenerife, La Gomera y El Hierro del Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias (COAC) impulsan un proyecto para que alumnos en prácticas de la UEC, que tiene sede en La Orotava, elaboren un estudio y varias propuestas de rehabilitación y uso futuro de la histórica Casona de La Gorvorana y su entorno. Este inmueble conserva elementos de los siglos XVII, XVIII, XIX y XX, y es de propiedad municipal, pero se encuentra en una situación de preocupante abandono.

En esta iniciativa participarán alumnos de Arquitectura, Márketing y Ciencias Sociales de la UEC. Pablo de Souza, docente de la universidad privada, recalcó que el proyecto integrará diferentes áreas de conocimiento con el objetivo de "dar un servicio a la sociedad".

El también docente de la UEC, director de este proyecto y presidente de la demarcación del COAC, Argeo Semán, detalló que los alumnos harán un diagnóstico del estado de conservación actual de la casona y, desde un punto de vista multidisciplinar, plantearán diferentes propuestas "no cerradas".

Para Semán, "esta iniciativa permitirá generar muchas ideas nuevas porque habrá mucha gente pensando en alternativas diferentes para ese gran espacio".

El edil de Promoción Cultural y Patrimonio Histórico, Adolfo González (PP), afirmó que aunque no hay una propuesta cerrada, los alumnos partirán de una idea base: que La Gorvorana forme parte de "un gran parque cultural con auditorio, que aspira a convertirse en un referente en el Norte".

A juicio de González, "esta iniciativa marca un punto de inflexión" en la vieja demanda social de restauración del edificio.

El alcalde realejero, Manuel Domínguez (PP), anunció que espera recibir las ideas de los estudiantes de la UEC en junio de 2016 y, a partir de ese momento, el ayuntamiento trabajará para promover el desarrollo de un proyecto concreto "con inversión pública, privada o mixta". En todo caso, el objetivo del grupo de gobierno es "restaurar la casona de La Gorvorana en el actual mandato".

El mandatario realejero destacó que "no es nada sencillo buscar una solución para un inmueble que se entregó al ayuntamiento en un estado lamentable". Pese a su evidente deterioro y los daños que ha sufrido por numerosos actos vandálicos -como los destrozos en los frescos de Bonnín-, el alcalde aseguró que la casona "está en riesgo, pero no en un estado ruinoso que haga temer por su estructura".

En este gran parque cultural de La Gorvorana, Domínguez aspira a generar actividad económica y riqueza: "También queremos que sea un proyecto sostenible desde el punto de vista económico".