El exalcalde de Garachico, expresidente de la Federación Canaria de Municipios y exdirector general de Deportes del Gobierno canario, Ramón Miranda Adán, asumió ante un tribunal el pasado 7 de junio que cometió delitos de malversación de caudales públicos y prevaricación administrativa al pagar en 2009, con dinero público, una sanción judicial por vulnerar en 2004 el derecho al honor de Luis López de Ayala y Aznar. Y aceptó, mediante un acuerdo previo al juicio, una condena de un año de cárcel y tres años y un día de inhabilitación. En sus primeras declaraciones a un medio de comunicación tras la condena, Miranda asegura que, pese a respetar el criterio del ministerio fiscal, tiene "la conciencia tranquila" y recalca: "Me inculpé por miedo a perder la libertad".

"Nunca entendí que esto fuera una causa personal y, además, me asesoré con los servicios jurídicos del ayuntamiento, que entendieron que aquellas declaraciones que hice contra ese señor formaban parte de un expediente de expropiación y que las realicé como alcalde y presidente del patronato en defensa de un interés público. Ramón Miranda, como persona y vecino, nunca hubiera hecho esas declaraciones sobre una expropiación a un particular para hacer un centro público de fisioterapia", explica a EL DÍA.

"Siempre pensé que yo había actuado como alcalde, en defensa del interés municipal. Me condenan por una vulneración del derecho al honor y, de acuerdo, con los servicios jurídicos se pagó una sentencia que yo jamás hubiera tenido que afrontar si no hubiera sido alcalde de Garachico. ¿Qué pinta un vecino, a título personal, haciendo declaraciones en defensa de una expropiación del ayuntamiento?", insiste.

El exalcalde conserva la orden de pago de 16 de octubre de 2009 de la sentencia al Juzgado Nº2 de Santa Cruz de Tenerife, que está firmada por el interventor, el tesorero y el alcalde, como presidente del patronato. A su juicio, las firmas de los dos técnicos "dejan claro que ellos no consideraban que el pago fuera incorrecto".

Pese a asumir los delitos y la condena, el exalcalde sostiene que "si todo se repitiera tal y como ocurrió entonces, volvería a actuar igual. No tengo conciencia de haber obrado mal, aunque la justicia tiene otro criterio y yo lo respeto".

Miranda sostiene que pudieron ir a juicio "con tranquilidad y otras sentencias favorables" para tratar de defender su inocencia, "pero una vez allí, antes del juicio, la Fiscalía nos hace una oferta a la baja y mi abogado me recomienda que la acepte. Hay una máxima que dice que uno sabe como entra en un juicio, pero no como sale... Teníamos argumentos y testigos que defendían que habíamos actuado conforme a derecho y en defensa del interés general, pero ante la oferta del fiscal, y como en justicia dos más dos no siempre son cuatro, optamos por aceptar pájaro en mano. La pena de cuatro años de cárcel bajaba a uno, y como no tengo antecedentes, no debía ingresar en prisión. Y eso para mí era lo fundamental".

"La inhabilitación era lo de menos, pero no podía perder la libertad por unas declaraciones en defensa de mi municipio. Me inculpé para no perder mi libertad, pero mi conciencia sigue tranquila", sentencia.

"Cuando el fiscal nos hizo la propuesta de rebajar la pena, yo pensé en mi familia. Acepté inculparme pensando en mi mujer y en mis dos hijos. En esos minutos en los que tuve que tomar la decisión, acepté los delitos, aunque sé que no actué con maldad".

"No obré con dolo, culpa y conciencia... quizás cometí un error, mal asesorado, pero quiero dejar claro que yo no metí la mano en la caja para robarle el dinero a los viejitos del hospital -sostiene Miranda-. Se pagó una sentencia con fondos del hospital por unas declaraciones en defensa de la ampliación de esa instalación pública. Un centro de fisioterapia que ahora es un centro de día para mayores. Y que existe gracias a que durante mi mandato expropiamos esos terrenos".

Afirma que, tras la sentencia, el momento más duro fue contárselo a sus dos hijos: "Los senté en el sofá y les dije: su padre nunca ha cogido un euro público para beneficio propio. Todo lo que tenemos se ha conseguido con el esfuerzo de nuestro trabajo".

"Las sentencias no son palabras de Dios, son palabras del ser humano, que debemos acatar aquí en la tierra. Pero lo que a mí me importa de verdad es el fallo divino y ante Dios yo tengo la conciencia tranquila. Pensé que actuaba correctamente", insiste Miranda, quien anuncia que dará explicaciones a sus vecinos "puerta por puerta".

Miranda ya ha devuelto a la Residencia de Ancianos Nuestra Señora de la Concepción los 6.306,19 euros con los que pagó su condena en 2009.

frases

En estos momentos de angustia para mí, me he sentido muy solo. Nadie de CC me ha llamado, salvo algún alcalde. En esto, CC me ha defraudado.

¿Qué pinta un vecino, a título personal, haciendo declaraciones a un medio en defensa de una expropiación del ayuntamiento?

Quizás cometí un error, pero yo no metí la mano en la caja para robarle el dinero a los viejitos del hospital.

"Puedo presentarme a las elecciones locales en 2019"

Miranda insiste en que "ahora mismo" no está pensando su regreso a la política local, aunque reconoce que "a lo mejor la providencia me ha ofrecido la oportunidad de volver en 2019. Por plazos, es posible, ya que mi inhabilitación se acaba el 8 de junio de 2019 y las elecciones locales serán el último domingo de mayo de 2019. Puedo presentarme a las elecciones y llegar a tiempo para la toma de posesión. La sentencia no me lo impide".

"A lo mejor me presento, y a lo mejor no, pero puede que en Garachico obtenga un muy buen resultado... Y llegaría perfectamente por los plazos", destaca.

"Ahora mi prioridad es rehacer mi vida. Estoy metido en el mundo de la empresa privada, de la emprendeduría, y ya veremos qué pasa de aquí a 2019. Existe la posibilidad de que yo pueda volver y me lo plantearé en su momento. Probablemente en 2018 ya lo tenga más que decidido", anuncia.

Miranda explica que "lo único" que le interesa es la política local, y cierra cualquier puerta a otros ámbitos de la política. Tras su reciente salida de CC, no se plantea enrolarse en otro partido tradicional, como el CCN, NC o el PNC: "No tengo en mente sumarme a otro partido tradicional. Si vuelvo, mi idea es participar en algo independiente, como una confederación de agrupaciones locales en defensa del Noroeste de Tenerife que algunas personas están iniciando. Un proyecto político centrado en el Noroeste que podría extrapolarse al resto del Norte. Esa idea no me desagrada".

"Agradezco a CC los años en los que trabajamos juntos, pero tengo que decir que en estos momentos de angustia para mí, me he sentido muy solo -reconoce-. Nadie de CC me ha llamado, salvo algún alcalde, a los que no voy a nombrar. En esto, CC me ha defraudado. Como partido, muestra una gran carencia emocional".