Declarada de Interés Turístico Nacional, la romería de San Roque, en Garachico, fue otra demostración de tradición, jolgorio y fervor. En unas fiestas cuyo origen se remonta al siglo XVII, este encuentro romero fue el colofón a un día que comenzó muy temprano, a las 9:30 horas, con la misa de los Peregrinos; siguió a las 11:00, con el traslado de la imagen de San Roquito hasta la parroquia de Santa Ana, donde la las 13:00 tuvo lugar la Misa Mayor antes del traslado, desde las 13:45 horas, de la imagen por la calle de Santa Ana hasta las inmediaciones del antiguo muelle embarcadero. A las 14:45 comenzó la romería por la calle Calvo Sotelo, hasta la iglesia de las Concepcionistas Franciscanas (monjas de clausura). El recorrido romero continuó por la calle Esteban de Ponte hasta la calle San Roque. La entrada a la ermita volvió a ser otro momento emotivo.

San Roque volvió a su pequeña morada entrando al templo de espaldas, mirando a los miles de romeros que le acompañaron durante el recorrido un año más. Parecía que el patrón de Garachico no quería despedirse. Mientras, los romeros gritaron vítores. El momento estelar de la fiesta de San Roque terminaba.

Hubo cierta demora en el inicio de la romería, esperando por el comienzo de la transmisión televisiva. Las previsiones se cumplieron y Garachico reunió ayer a cerca de 10.000 personas para participar de este acto.