El Ayuntamiento del Puerto de la Cruz debía a los bancos 37.417.690 euros en 2013, tras cuatro años de duros ajustes y estrecheces económicas, a las 9:24 horas del día de ayer, el consistorio dejó a cero su deuda bancaria. Un último pago de 528.023 euros ha permitido que el históricamente endeudado Consistorio portuense cancele toda su deuda y salga del plan de ajuste "seis años antes de lo que estaba previsto (2023)", según recalcaron el alcalde, Lope Afonso (PP), y la concejala de Gestión Económica, Sandra Rodríguez (CC).

Ambos aprovecharon la rueda de prensa de ayer para romper, de forma simbólica, un papel que representaba la deuda local. Según Afonso, "una pesada losa que estaba sobre los portuenses", que pasó de los 37,4 millones de 2013 a 25,2 millones en 2014; 21,6 millones en 2015; 5,5 millones en 2016, y apenas 550.000 euros en julio de 2017.

Afonso y Rodríguez quisieron agradecer a los portuenses "el gran esfuerzo que han tenido que realizar" en los últimos cuatro años, cuando los ajustes obligaron al consistorio a suprimir bonificaciones, aumentar impuestos y recortar servicios "sin paralizar la ciudad". Ambos recordaron que "ha sido muy duro", pero el resultado "ha valido la pena".

Pese a que formalmente el consistorio sale ya del plan de ajuste, los vecinos empezarán a notar la ausencia de deuda a partir del presupuesto de 2018, año en el que el gobierno local (PP-CC) plantea una rebaja de la presión fiscal, la recuperación de muchas bonificaciones y la mejora de servicios que en la actualidad concentran muchas críticas: recogida de basura y limpieza viaria, y mantenimiento de jardines. El objetivo municipal es recuperar también actuaciones que llevan años paralizadas, como el asfaltado de calles.

Además de librarse del plan de ajuste, el ayuntamiento podrá adjudicar de nuevo en 2018 los contratos de jardines, residuos y mantenimiento de instalaciones municipales. Se vencen en los próximos meses y el momento de negociar llegará sin deuda bancaria.