El Norte de Tenerife es un terreno propicio para los proyectos olvidados. Más allá de infraestructuras que parece que nunca terminan de concretarse, la comarca atesora una larga lista de iniciativas que un día se plantearon como posibles y que en la actualidad han caído en el olvido o están definitivamente descartadas. Entre las más llamativas: un tren al Teide, un teleférico entre La Paz y Martiánez, un gran puerto deportivo en Tacoronte, un aeródromo en la Isla Baja, un túnel entre La Orotava y Güímar, un hipódromo de carreras en Los Realejos, un tranvía en el Valle de La Orotava, un tren cremallera en la costa de El Sauzal o un funicular en Garachico, un objetivo al que aún no renuncia el Ayuntamiento de la Villa y Puerto.

El ingeniero Juan José Santa Cruz, presentó el día 11 de octubre de 1912, en el Centro de Propaganda y Fomento del Turismo de la capital, su proyecto para crear una línea férrea que atravesaría la Isla de Este a Oeste por la cordillera dorsal, desde la ciudad de Santa Cruz hasta las faldas del Teide. Los principales diarios isleños se hicieron eco de la noticia y expresaron su apoyo incondicional al llamado "Ferrocarril central".

"La Opinión" de la época subrayaba que todos, "excepto raras excepciones de viejos rutinarios y pesimistas, algunos ignorantes y otras tantas inteligencias embotadas", confiaban en ver realizado el proyecto del tren al Teide. También destacaba la buena acogida de la iniciativa "en todos los pueblos de la Isla" y tachaba cualquier postura contraria de "antipatriótica".

J. González Martín expuso en 1912 su "Teoría del Ferrocarril Central de Tenerife" en el diario "El Progreso", en la que alababa sus beneficios turísticos: "Si hoy vienen muchos expresamente a ascender al Teide en forma incómoda, cara, cansada, tardía a pie, molesta e insegura en malos jamelgos, seguro es que cuando el acceso a su cumbre sea rápido, confortable y económico, ninguno de los que aborden a nuestras playas dejará de visitarla, y muchos más aún vendrán exclusivamente a ello". Pese a recibirse con pasión, aquel tren nunca llegó a construirse.

El Cabildo de Tenerife y los ayuntamientos del Valle de La Orotava barajaron entre 1989 y 2010 la posibilidad de crear una línea de tren monorraíl o tranvía para conectar La Orotava, Puerto de la Cruz y Los Realejos. Tras ejecutarse el tranvía en la capital, no ha vuelto a hablarse de esa posibilidad.

El exalcalde villero Isaac Valencia fue un gran defensor del túnel entre La Orotava y Güímar, una obra de 16 kilómetros para conectar a través de la cordillera dorsal los valles de La Orotava y Güímar. Primero se pensó en una carretera, pero en 2002 se barajó la opción de un túnel de uso ferroviario para conectar Norte y Sur "en menos de 6 minutos". La idea reposa en una gaveta junto al tren o metro del Norte.

Pérez Labajos no logró sacar adelante su gran puerto deportivo en la costa de Tacoronte "con 500 atraques y la mayor piscina natural de Canarias".

El Cabildo barajó entre 2012 y 2013 autorizar la construcción de un aeródromo en la Isla Baja. La idea fue rechazada por el Consistorio de Buenavista del Norte.

El hipódromo de carreras de Los Realejos fue uno de los proyectos estrella de Manuel Domínguez en 2010, pero nunca ha llegado a concretarse.

En la lista también podrían aparecer proyectos descartados como el circuito de motocross de Benijos, en La Orotava; la playa de Las Aguas, en San Juan de la Rambla; el auditorio subterráneo del Charco de la Araña, en Los Silos; el tren cremallera y el puerto deportivo de la costa de El Sauzal, o el campo de golf de La Victoria.