El Pleno del Ayuntamiento de La Orotava dio cuenta ayer de un informe de la Tesorería municipal en el que se advierte de que en el segundo trimestre de 2018 el consistorio incumplió los parámetros de morosidad al pagar sus facturas a una media de 103 días (cuando el límite está en 60 días). Todos los grupos políticos, incluido el grupo de gobierno (CC), mostraron su preocupación por una situación que el edil de Hacienda, Juan Dóniz, achacó al atasco de las facturas en el área de Intervención, donde la fiscalización llega a demorarse hasta casi 90 días.

Según Dóniz, el periodo medio de pago a proveedores es en el Ayuntamiento villero de 18,61 días, muy por debajo del límite de 30 días que establece la ley. Sin embargo, ese periodo medio de pago se contabiliza a partir de que la factura haya sido fiscalizada por la Intervención. Y en ese trámite es donde se genera el atasco.

El portavoz para asuntos económicos del PSOE, Víctor Luis, destacó que de las 490 facturas que se abonaron en el segundo trimestre del año, por valor de 2,4 millones de euros, "solo el 9% se pagaron en el plazo legal, el resto, el 91%, las cobraron fuera de plazo".

"Estamos ante un colapso en la fiscalización", advirtió Luis, quien lo achacó a "un problema de gestión y de organización interna".

Raúl González (USP) lamentó que este "atasco administrativo y político" perjudique a "autónomos, empresas y familias". Desde su formación , plantearon la necesidad de llevar a pleno "un plan de gestión" para agilizar el funcionamiento de la administración local.

Rafael González (PP) tildó de "inaceptable" la morosidad del consistorio y dio un suspenso a la gestión del gobierno villero.

Dóniz insistió en que a su gobierno también le preocupa mucho la situación y en que ha reforzado el área de intervención con "un auxiliar más". Para avanzar en una solución, el edil de Hacienda propuso celebrar el mes que viene una comisión extraordinaria "para que el interventor aclare qué genera este retraso", ya que el consistorio "sí tiene liquidez para pagar".

El colectivo Tauro dará nombre a la Casa de la Juventud

El Pleno del Ayuntamiento de La Orotava acordó ayer, por unanimidad (CC, PSOE, PP y USP), que la Casa de la Juventud lleve el nombre de la Asociación Juvenil Tauro, un colectivo que colaboró entre 1973 y 1978 en "la mejora y modernización de la sociedad villera, así como en la formación de toda una generación de jóvenes". Fue una "corta pero intensa y fructífera labor juvenil; éramos jóvenes intrépidos movidos por el ardor de la rebeldía hacia un sistema que asfixiaba nuestra propia voluntad liberadora", según explicó Toño Mesa (en la foto), quien ayer ejerció como portavoz del colectivo ante el pleno. En próximas fechas, el consistorio organizará un acto en el que se reconocerá la labor de Tauro y se dará su nombre a la Casa de la Juventud. Mesa explicaba ayer que "desde la libertad, Tauro cambió el rumbo del movimiento asociativo, hasta entonces tutelado por un régimen autoritario (...). No solo sirvió de instrumento para la libertad, sino que consumó infinidad de acciones culturales y encuentros entre jóvenes de la Isla, desplegando también una intensa labor social".