El Ayuntamiento del Puerto de la Cruz ultima los trámites administrativos para que la obra del nuevo Centro Insular de Natación, que se construirá en la parcela de la vieja piscina municipal, pueda licitarse "lo antes posible". El edil de Urbanismo, Juan Carlos Marrero (CC), detalla que entre mañana y el lunes día 1 de octubre, el consistorio tiene previsto dar traslado al Cabildo de la conformidad municipal con el proyecto básico de transformación de la piscina municipal en un Centro Insular de Natación, junto a la concesión recibida por parte de Costas, para que "se pueda, por fin, licitar las ansiadas obras y comenzarlas, si no hay problemas, a principios de 2019".
"Ya tenemos los informes jurídicos y del aparejador; y la concesión de los terrenos, por lo que sólo falta darle la conformidad oficial y trasladarla al Cabildo. Espero que mañana o este lunes", avanzó Marrero.
"Podemos decir que el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz ya tiene toda la parte administrativa liquidada y que, una vez llegue al Cabildo insular, se podrá iniciar la licitación", insistió Marrero.
La ciudad turística se quedó sin piscina municipal el 13 de diciembre de 2015. La rotura de una tubería y una inundación en la vieja sala de máquinas de la instalación, construida en los años 70 del siglo XX, obligó a un cierre que ya dura casi tres años.
Pese a que la piscina era una instalación municipal, el Cabildo de Tenerife se comprometió, en febrero de 2016, a asumir el coste de redactar el proyecto y ejecutar la obra de "un moderno Centro Insular de Natación con espacio para deportistas aficionados y para tecnificación en natación, natación sincronizada, waterpolo o salvamento y socorrismo".
La obra de este centro deportivo insular tiene un plazo de ejecución de 20 meses y un presupuesto que ronda los 11 millones.
A principios de 2018, tanto el Ayuntamiento portuense como el Cabildo de Tenerife esperaban poder licitar la obra antes de verano. Esa previsión no se cumplió y ahora se enfila el último trimestre del año con el reto de licitar, antes de que llegue 2019, una de las mayores obras previstas por el Cabildo de Tenerife en el Puerto de la Cruz.
Otro día clave para la calle Tegueste
La situación del tramo desalojado de la calle Tegueste puede considerarse estable, "con zonas donde las grietas no crecen y otras donde aumentan de forma muy lenta", detalla Marrero. Tras concluir la inyección de hormigón en los bulones instalados en la pared del acantilado, hoy se cumple el plazo de 48 horas que se dejó para que fraguara. "Hoy por la mañana sabremos cómo ha seguido evolucionando la calle mientras el hormigón se ha endurecido y de eso dependerá la siguiente fase de los trabajos, que se centrará en asegurar una de las dos cuevas situadas bajo la calle", explicó el edil. La intención de los técnicos es crear una estructura que sujete la cueva antes de empezar a trabajar en la zona donde no se habían instalado bulones, y donde existe otra cueva inestable. Esta intervención, que esperan comenzar mañana, daría más estabilidad a prácticamente la mitad de la zona desalojada el pasado 14 de septiembre.
La estación de guaguas va tomando forma
Marrero visitará mañana la obra de la nueva estación de guaguas del Puerto de la Cruz, una actuación que empieza a tomar forma con cimientos y columnas que empiezan a levantarse en la parcela. Los trabajos, que comenzaron en abril, avanzan sin imprevistos de importancia, por lo que el edil de Urbanismo del Ayuntamiento portuense cree que "se va a poder cumplir el plazo anunciado inicialmente". Esta obra fue adjudicada por el Cabildo por casi 2,2 millones de euros. Su plazo de ejecución es de 12 meses, por lo que debería acabarse en abril de 2019.