Los avaderos es un barrio de Santa Cruz de Tenerife situado en el barranco de Almeida, que pertenece administrativamente al Distrito Centro Ifara. El origen del barrio y su nombre proceden de la construcción de unos lavaderos públicos en los terrenos donados por la familia Suárez, en 1837. os lavaderos estuvieron en funcionamiento hasta los años setenta del siglo pasado. Posteriormente, se abrieron nuevamente como sala de exposiciones, en 1982. Actualmente viven allí 292 personas. Y entre ellas, una muy especial, Marina, la verdadera guardiana de os avaderos. Una vecina que ha dedicado su vida entera a cuidar los antiguos lavaderos, hasta convertirlos en una excepcional sala de exposiciones y centro cultural. Marina, que ya cumplió 78 años, aunque no los aparente, se jubiló hace poco como presidenta de la asociación de vecinos, aunque sigue al pie del cañón, supervisando la sala de exposiciones y manteniendo muy vivo el espíritu de los antiguos lavaderos de Santa Cruz. levaba casi cuarenta años al frente de la asociación y conoció a muchos alcaldes y concejales del distrito Centro, entre los que me cuento, pero nunca le oí una sola mala palabra para ninguno de ellos. Manuel Hermoso, José Emilio García Gómez, Miguel Zerolo y José Bermúdez comprobaron personalmente en sus carnes políticas la tenacidad de la dama de os avaderos, que cuando sacaba el rejo, detrás de una calculada dulzura, en defensa de su barrio, hacía temblar la Casa de os Dragos con sus inquilinos dentro. Como cuando intervino ante el pleno del Ayuntamiento para frenar los planes, o mejor dicho las palas, del Ayuntamiento que amenazaban las casas del barrio, porque la Corporación planeaba sustituirlas por edificios. García Gómez quería modernizar un barrio humilde y destartalado, que afeaba la trasera de la Rambla y del hotel Mencey. Marina conmovió de tal manera al alcalde con más fama de duro de la historia de Santa Cruz, aficionado a las palas, convencido por la sentida y acalorada defensa de os avaderos de siempre que llevó a cabo la presidenta de la asociación, que cambió de opinión y salvó el barrio. Marina consiguió, además, que las familias pintaran y embellecieran sus casas, para no desentonar con el barrio de arriba, el de os Hoteles. El pequeño y humilde barrio chicharrero de os avaderos se ha ido transformando en los últimos años, para bien, gracias a Marina y otros vecinos que la han ayudado en sus sucesivas juntas. Aunque aún queda mucho por hacer, sobre todo ahora que la crisis ha traído algunos okupas que se han instalado, jugándose la vida, en casas en ruina que todavía quedan en el barrio. En os avaderos conviven hoy otra vez en el mismo espacio dos barrios, el de las familias de toda la vida y el de los recién llegados, los okupas, como la serie de televisión "Up&Down". Unos nuevos y molestos vecinos que han convertido la trasera de la Rambla o del hotel Mencey en verdaderos basureros incontrolados, que el Ayuntamiento debe erradicar, por su propia seguridad y la de los residentes de toda la vida. Solares abandonados peligrosos, sin vallar, y casas en ruina, convertidas en basureros y nidos infectos de ratas. Y no es sólo un problema estético de os avaderos, sino de salud pública de toda la ciudad, por lo que el Ayuntamiento debería tomárselo en serio y solucionarlo de una vez y para siempre, por ejemplo, haciendo cumplir sus propias ordenanzas y obligando a los propietarios a limpiar y vallar los solares. Si ellos no lo hacen, debe hacerlo el propio Ayuntamiento y pasarles la factura, además de la multa correspondiente. os vecinos y vecinas de os avaderos y del resto de los barrios de Santa Cruz merecen vivir en una ciudad limpia y no entre ratas. Qué menos.

*Abogado, economista, MBA, diputado en el Parlamento de Canarias y candidato a la Alcaldía de Santa Cruz de Tenerife por el CCN en 2015

@ignaciogonsan