El Gobierno regional, a través de la Prestación Canaria de Inserción, concedió ayudas el pasado mes de febrero a 149 familias de la Isla en exclusión social, once más que en enero, según informó la Consejería de Bienestar Social.

La Prestación Canaria de Inserción contempla la elaboración de un itinerario de inserción para el beneficiario de esta ayuda, de entre 467 y 652 euros, como fórmula para encauzar un proyecto de futuro que le permita salir de la situación en la que se encuentra. De esta forma, se confecciona un programa específico de actividades dirigido a la unidad de convivencia, que son elaborados por los profesionales vinculados al área de trabajo social del centro municipal de servicios sociales.

En estos programas también están implicados los agentes de empleo de desarrollo local y profesionales vinculados a las áreas locales de sanidad, educación y vivienda, para facilitar la integración de estas personas a través de proyectos sociales o formativos. También se incluyen programas de empleo o de vivienda.

En el ámbito de la normalización social y personal, los programas se encaminan a través de acciones contra la desestructuración personal, así como hacia la adquisición de hábitos saludables de vida, o bien hacia la información y organización para acceder a los recursos públicos o reclamar derechos económicos.

De igual forma, se trabaja con los beneficiarios de estas ayudas en acciones contra la desestructuración familiar, o incluso la atención a personas dependientes, a través de mecanismos como el respiro familiar en el propio domicilio o en centros ajenos a éste; actividades sociales o la adaptación de personas que provienen de sectores con problemáticas específicas, como ex reclusos o inmigrantes con necesidades de adaptación sociocultural.