El PSC se dio cuenta de que la comisión del "caso KEC" no es secreta. Que los políticos, al menos algunos, no tienen palabra. Que el compromiso de guardar silencio sobre todo lo tratado está siendo violado. Y, además, asegura que las filtraciones salen de las filas del PP. Pero no del representante de los populares en este organismo, el veterano Miguel Ángel Morcuende, sino "del otro PP", tal y como lo calificó, sin dar más "pistas", el socialista Antonio Riverol, que, por ello, anunció ayer su dimisión como portavoz o único responsable de dar oficialidad a los medios de comunicación sobre los acuerdos alcanzados.

Riverol no duda del silencio de CC ni de la concejal no adscrita, Alicia García (antaño del PP), y pone la mano "en el fuego" por su compañero de partido, Sergio Matos. Él tiene claro, o eso parece, que a todos los medios, a todos, las noticias se las filtra el PP "para crear un juicio paralelo" que favorezca, o tal vez no, a Juan José Cabrera, concejal que denunció supuestas irregularidades en la adjudicación de obras al grupo KEC, en el que colabora el padre del concejal de Obras, Antonio Acosta.

Con o sin portavoz, la comisión, que se creó el pasado día 19 de noviembre, continuará reuniéndose. Han declarado en la misma tres técnicos y el presidente de la mesa de contratación en la que se adjudicaron las obras "en conflicto", Jesús Nuño, que, en teoría, debe ser "del otro PP" porque, a su juicio, según informó de lo que recuerda de aquellas licitaciones, todo se hizo dentro de la legalidad.

La comisión comenzó con la negativa de Juan José Cabrera de entregar documentos para justificar su denuncia. El PP, entonces, pidió que Antonio Acosta compareciera, pero CC y PSC lo impidieron al votar en contra. Luego llegaron las declaraciones de los técnicos, de Jesús Nuño, y, al final, el acuerdo para citar a los dos concejales implicados para una próxima reunión, programada, sin prisas, para mediados de diciembre.

Ahora, con filtraciones incluidas, se duda de qué investigan los seis concejales que se "encierran" en el ayuntamiento porque se sabe que el padre de Antonio Acosta colabora o trabaja con la empresa KEC y que las obras fueron otorgadas de forma legal.

Sólo falta que alguien más toque a la puerta...